Es
una de las películas de Sean Connery que más me gusta el que hoy ya
es considerado un título de culto, pues no tuvo demasiado éxito en
su momento. De hecho, se invirtieron 16 millones de dólares en ella y
apenas se recaudó un millón más de esa cantidad, así que quedó
comido por servido aunque los gastos de distribución probablemente
generaron algunas perdidas.
Pero
muy injustamente porque me parece un título más qué interesante.
No obstante, ya en su génesis prometía ser un proyecto muy
complicado de sacar adelante. Paramount la rechazó precisamente por
tener un presupuesto excesivo. Lo que llevó al ofrecimiento a Warner,
la cual valoró el hecho de no tener ninguna película de ese tipo.
Aún así, redujo el presupuesto inicial y la produjo a través de una
productora más pequeña asociada a Warner.
Esa reducción
provocó que todas las instalaciones de la base en la que se
desarrolla la historia, cada vez que son vistas desde planos lejanos,
lo que estamos viendo son maquetas, aunque muy bien hechas, eso sí.
En cuanto a los interiores, la influencia de la nave Nostromo de
“Alien, el octavo pasajero”, se hizo notar en los pasillos y
habitáculos de la instalación.
Al
mando un Peter Hyams, anteriormente director de fotografía, lo que
se percibe por las ambientaciones de sus películas. Hyams nunca ha
sido muy valorado por la crítica. Sin embargo, personalmente le
considero un buen artesano que tiene un puñado de títulos como poco
interesantes, como “Capricornio Uno”,(también en el blog la
podéis encontrar), “Los jueces de la ley”, “Testigo
accidental”. Estas dos últimas demuestran que no se movía mal en
el terreno del thriller. Un entretenido monster movie, “The relic”. Y
se atrevió a hacer una secuela de “2001, una odisea del espacio”, “2010, odisea dos”.
Por
su parte, Sean Connery, tras su etapa como agente 007 con licencia para
matar, para quitarse la etiqueta de James Bond, pasó a protagonizar
diversas películas de corte épico como “El viento y el león”,
“El hombre que pudo reinar”, “Robin y Marian” y “El primer
gran asalto al tren”, y una de catástrofes con un reparto de
estrellas pero que fue un fracaso, "Meteoro". Por eso el aceptar esta película.
Que
también lo fue aunque con mucha menor inversión y con él como
protagonista absoluto, no formando parte de un reparto coral. El que
le acompañó en esta ocasión era más reducido y sin estrellas pero
con nombres tan competentes como Peter Boyle y Frances Sternhagen.
“Atmósfera
cero” hacía una crítica del mundo de la explotación industrial
que utilizaba a sus trabajadores como meras hormigas. Es lo que
descubre en la investigación el protagonista, la parte policíaca de
la película. Porque Hyams mezclaba y bien varios géneros. Uno es
ese. Otro era evidentemente la ciencia-ficcion. Pero lo que realmente
era, al menos prácticamente toda su segunda mitad y más claramente
en su último tercio, era el western.
Y
no uno cualquiera, hay demasiados elementos argumentales similares al
clásico del western de Fred Zinneman, “Solo ante el peligro”,
tantas que casi parece un remake no oficial. Toda la parte en la que
el protagonista espera, mientras busca ayuda entre los integrantes de
la base minera, a los matones que vienen a por él, es calcada. Y
después el enfrentamiento con ellos se salda, con sus diferencias,
de forma parecida. Incluso el desenlace, con un sheriff abandonando
el lugar tras haber acabado con ellos.
En
2009 se habló de hacer un remake, de nuevo a cargo de Warner Bros,
que continúa teniendo en propiedad los derechos de explotación. En
su momento se anunció que estaba en desarrollo. Incluso se había
elegido director, concretamente Michael Davis, que venía de dirigir
“Shoot’Em Up” y también había guionistas, supuestamente. Pero
doce años después no se sabe nada del proyecto.
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