Castle Rock

   FICHA TÉCNICA

Título: Castle Rock.

Dirección: Sam Shaw (Creator), Dustin Thomason (Creator), Michael Uppendahl, Daniel Attias, Andrew Bernstein, Kevin Hooks, Nicole Kassell, Greg Yaitanes, Ana Lily Amirpour.

País: Estados Unidos.

Año: 2018.

Duración: 50 min (10 episodios).

Género: Fantástico, intriga, terror.

Interpretación: Melanie Lynskey, André Holland, Jane Levy, Sissy Spacek, Bill Skarsgård, Scott Glenn, Terry O'Quinn, Chosen Jacobs, Caleel Harris, Ann Cusack, Noel Fisher, Adam Rothenberg, Chris Coy, Zabryna Guevara, Josh Cooke, Aaron Staton, Charlie Tahan, Jeffrey Pierce, Jeff Bouffard, Cassady McClincy

Guión: Sam Shaw, Dustin Thomason, Gina Welch, Marc Bernardin, Lila Byock, Tom Spezialy, Heather Thomason, Vinnie Wilhelm, Scott Brown (Novela: Stephen King).

Producción: Sam Shaw,Dustin Thomason, J.J. Abrams.

Música: Chris Westlake, Thomas Newman.

Fotografía: Jeffrey Greeley, Richard Rutkowski.

Distribuidora: Hulu.

   CRÍTICA

   SINOPSIS: Henry Deaver, abogado que se ocupa de penas de muerte, vuelve a su pueblo natal tras ser mencionado por un extraño chico encontrado en una jaula en un centro carcelario cuyo alcaide acaba de suicidarse. Pero su investigación le llevará  a gran cantidad de secretos de Castle Rock, que le incluyen a él mismo.

   LO MEJOR: Lo más fácil hubiera sido preparar una bonita ensalada de guiños (ojo, que hay una buena ración de ellos) para darles a los fans del universo de Stephen King un puñado de referencias nostálgicas que les saciara. Repito, los hay. Pero el mérito de la serie es no quedarse en ello. Y en esa labor, se nota la apreciable mano de J.J.Abrams en la producción para ofrecernos una historia que desde luego es deudora del estilo temático de King pero no es imprescindible ser un seguidor suyo para disfrutarla. Desde luego, para los que si lo sean (ente los cuales me cuento) lo van a hacer incluso más, haciendo las delicias tanto de lectores de sus novelas como de los admiradores de sus adaptaciones cinematográficas más famosas. Porque tiene un argumento totalmente independiente pero bastante más complejo de lo que probablemente cabía esperar, que cualquiera diría que ha sido escrita por el mismísimo King, pues se dan todos los elementos de sus temáticas, sus esquemas en las tramas y su tipología de personaje. Podemos ver como se tocan cuestiones como el diablo, los poderes paranormales, los asesinos en serie, los portales interdimensionales, viajes en el tiempo, fanatismo religioso, la lucha entre el bien y el mal y el paralelismo narrativo entre pasado y actualidad. No se sabe cómo, pero consigue meterlo en el mismo saco con coherencia y sin que parezca al baño maría, manteniendo el misterio prácticamente sin altibajos y de forma que cada episodio tenga su aliciente de entretenimiento adictivo y considerables giros verdaderamente sorpresivos.

   Interpretación: El reparto al completo es muy notable. Pero por encima de todos ellos destaca una impagable Sissy Spacek. Ella sola reúne un cocktail de nostalgia, humor y talento. Da gusto volver a verla. En el siguiente escalón estaría un Bill Skarsgard, otro de los alicientes de la serie y un entrañable Scott Glenn, secundando a Spacek extraordinariamente. Me parece muy prometedora Jane Levy, aunque no demasiado aprovechada, parece que eso obedece a reservarla para la segunda temporada. Y, por último, André Holland (por muchas criticas que le destaquen yo le veo normal) y Melanie Lynskey, que están correctos.

   Escena (spoiler): Mas que enumerar momentos destacados, como la muerte de Pamborn,  el suicidio de Lacy,  las masacres en la cárcel y la comisaria, etc.. como estamos en terreno de spoilers voy a señalar varios de los “easter eggs” de Stephen King y dar mi versión sobre el ambiguo final. Tenemos una colección de guiños, como una tienda llamada Clayborne (“Eclipse total”), un mapa donde figura Derry en honor a “It”, de hecho, el personaje de Bill Skarsgard recuerda a Pennywise fugazmente, es mas dice esperar 27 años, el baño de Sissy Spacek lavando la sangre como en “Carrie”, los pasos atrás de Henry Deaver niño como en el laberinto de “El resplandor” (por cierto, poder clarividente que posee Molly (Linskey), también hasta Jackie (que es sobrina de Jack Torrance y empuña el hacha con igual habilidad), el cementerio de “El misterio de Salem's Lot”. Por no decir que Castle Rock es escenario de novelas como “La mitad oscura”, “Cujo” o “La tienda”. Respecto al final considero que el paso del Deaver 2 (Skarsgard) por el portal produce una perturbación del espacio-tiempo que podría dar lugar a todos lo acontecimientos negativos de Castle Rock. Deaver 1(Holland) decide encerrarle de nuevo en la jaula porque no quiere su destino en caso de volver a cambiarse. Pero cabe la posibilidad de que, en la momentánea transformación facial, se diera cuenta que Deaver 2 es el diablo y decidiera encerrarle, cosa que se confirmaría con la sonrisa final, quizá sabiendo que todo volvería a repetirse como en un bucle. La post créditos nos da pistas de cual puede ser el escenario de la segunda temporada, el propio Overlook.

   LO PEOR: Mas a través de rumores, pero quizá nos han hecho pensar que la serie sería un compendio de retazos de las novelas de Stephen King. Una especie de “Ready player one” del universo King, cosa que no es y quizá a buen criterio. Pero es cierto que algunos ya nos relamíamos. Además, al final quizá le falte un poco de punch, algo mas impactante. Pero da la impresión de que no han quemado todas las arcas y han guardado cartuchos de reserva para más adelante.

   CITAS: “Siempre he creído que el diablo era una metáfora. Ahora sé que no”. “Yo no debería haber salido de la jaula”. “¿Ya ha empezado?”. “Cada centímetro de esta ciudad está manchado con el pecado”. “Hay algo malo en ese muchacho”. “¿Sabes guardar un secreto? Ya hemos tenido esta conversación varias veces”. “No te das cuenta de lo que está pasando aquí”. “Sé que sigues escuchándolo”.

   REFERENCIAS: Decir que el universo Stephen King sería una perogrullada. Pero no es una especie de “Ready player one” del escritor de Maine. Tiene más que ver con el estilo y lo que han pretendido hacer con “Stranger Things”.

   CONCLUSIÓN: 7’5. Una serie que puede satisfacer tanto a seguidores de Stepen King como a los que no, pero para los primeros hay una buena ración de guiños.