Escenas Míticas: Especial Navidad - La jungla de cristal

   Algunos advertirán que muchos títulos se están repitiendo en ciclos ya iniciados con esos mismos títulos. La razón es que está sección se creó con la única intención de destacar las mejores escenas de cada uno adhiriendo un leve comentario de cada una de ellas. Pero hace tiempo que está sección es bastante más completa, añadiendo más escenas y acompañándolas con información, anécdotas y reflexiones sobre las películas. Y ahora le ha tocado el turno de “remasterizar” el ciclo de “Navidad”.

   Aunque, como ya se dijo en su momento, varias de ellas no son puramente navideñas sino que están encuadradas temporalmente en el periodo de estas fiestas y por ello suelen programarse las distintas cadenas televisivas en estas fechas. Eso es justo lo que ocurrió con “La jungla de cristal” y también con la siguiente secuela. Ya a partir de la tercera se cambió el chip navideño.

   La película está basada en la novela “Nothing last forever” de Roderick Thorp, publicada en 1979, que era una secuela tardía de la novela “El detective”, del mismo autor, de 1966, y que fue adaptada al cine con Frank Sinatra como protagonista, lo que obligaba por contrato a ofrecerle de nuevo el papel en caso de desarrollar una secuela. Y eso fue que por edad le pegaba a pesar del tiempo pasado entre ambos libros porque el protagonista del segundo estaba jubilado. No obstante, Sinatra lo rechazó.

   Entonces el proyecto dio un giro brutal y se pensó en plantear la película como una secuela de “Commando” y así ofrecer el papel a Arnold Schwarzenegger y que así retomará el personaje. Pero éste también rechazó la proposición. Curiosamente, el ofrecimiento se hizo extensivo a una larga nómina de estrellas que, uno tras otro, fueron negándose, no se sabe muy bien porque, a interpretar el personaje principal. Entre ellos estaban Sylvester Stallone, Harrison Ford, Richard Gere, Clint Eastwood, Robert De Niro o Don Johnson.

   Todos ellos lograron el éxito, si no lo tenían ya, igualmente, pero imagino que precisamente Johnson se habrá arrepentido toda su vida teniendo en cuenta la fama que adquirió el personaje de John McClane y el rotundo éxito comercial de la saga. Cómo habría cambiado su carrera de haber aceptado el papel. Entonces se le ofreció a Bruce Willis, que todavía no tenía ni mucho menos la categoría de estrella.

   Pero Fox, estaba desesperada por las continuas negativas. Para colmo, a los productores no les entusiasmaba la elección de Willis, por considerarlo un actor de marcada etiqueta de comedia y que tan solo tenía como referencia la serie “Luz de luna” y la película “Cita a ciegas”. Aún así, esa desesperación por encontrar protagonista, que casi da al traste con todo el proyecto, les llevó a ofrecerle 5 millones de dólares, una cantidad muy alta en aquella época.

   Willis aceptó y el resultado fue la creación de uno de los héroes más icónicos del cine de acción, que situó al actor a la altura de Stallone o Schwarzenegger en el género. También resultó acertada la elección de Alan Rickman, pues era su primera película tras un periplo únicamente en el campo de la televisión y hoy figura en todas las listas de mejor villano cinematográfico. Completaban el reparto Bonnie Bedelia, Reginald Veljhonson (serie “Cosas de casa”), ambos repetirían en la segunda parte. Y Alexander Godunov.

   Tras la cámara colocaron a John McTiernan, qué tan solo un año antes había triunfado con “Depredador”. El resultado fue un éxito rotundo, la película costó 28 millones de dólares y recaudó cuatro veces más, hasta los 140 millones. Y además cosechó muy buenas críticas. Se convirtió en una de las películas mas icónicas de los ochenta y una de las mejores del género de acción. Su fórmula fue copiada hasta la saciedad. “Alerta máxima”, “Pasajero 57” o “Muerte súbita” son solo unos ejemplos de ello. Incluso tuvo cuatro nominaciones al Oscar, (montaje, sonido, efectos sonoros y visuales).

   Tuvo cuatro secuelas más hasta la fecha, pues actualmente se rumorea la gestación de otra más. “La jungla 2, alerta roja” (1990), pasó a dirigirse por Renny Harlin, que se pondría de moda como director de acción con títulos como “Máximo riesgo”. Para la tercera se consiguió la vuelta de McTiernan en “Jungla de cristal 3, la venganza” (1995). Y para “La jungla 4.0” (2007) se contrató a Len Wiseman (“Underworld”). Para “La jungla 5, un buen día para morir” se eligió a John Moore y es muy claramente la peor de todas.