FICHA TÉCNICA
Película: El
hundimiento.
Dirección: Oliver Hirschbiegel.
País: Alemania.
Año: 2004.
Duración: 155 min.
Género: Drama,
bélico, histórico.
Interpretación: Bruno
Ganz, Alexandra Maria Lara, Corinna Harfouch, Ulrich Matthes, Juliane Köhler,
Heino Ferch, Christian Berkel, Matthias Habich, Thomas Kretschmann, Rolf
Kanies, Christian Redl, Elizaveta Boyarskaya, Julia Jentsch.
Guión: Bernd
Eichinger (Libro: Joaquim Fest).
Producción: Bernd
Eichinger.
Música: Stephan Zacharias.
Fotografía: Rainer Klausmann.
Distribuidora: Constantin
Film.
CRÍTICA
SINOPSIS: Berlín,
abril de 1945. La Segunda Guerra Mundial quema sus últimos días. La ciudad está
a punto de caer pero Hitler se niega a capitular y abandonar el bunker donde se
encuentra escondido.
LO MEJOR: La narración de Oliver Hirschbiegel es magnífica especialmente
en su capacidad expositiva de los hechos, pues está a medio camino del
documental (de hecho, al parecer, sujeta a un rigor histórico envidiable, es
razonablemente fiel a lo ocurrido realmente), pero no deja de parecer nunca una
película normal, digo de ficción basada en la realidad. Y si se reserva, sin
estridencias, su particular enfoque (queda muy claro en su prólogo y epílogo,
con imágenes de archivo), haciendo un retrato de la figura de Adolf Hitler,
tanto en su delirio psicópata y déspota, cegado por la ambición de su empresa a
la que pone por encima de las personas y, por otro lado, humanizándolo (ya sé
cómo suena) en detalles del trato personal y cercano. Pero también se hace un
retrato del fanatismo, no solo del nacionalsocialismo, del seguimiento
incondicional a un líder, sean cuales sean sus ideas. Que nadie se lleve a
engaño y se rija por la nacionalidad alemana del film, ni de su duración de dos
horas y media. No es ni pesada ni lenta. Se logra gracias a un ritmo adecuado
donde cada momento es un retazo de historia, son instantes épicos y únicos
dónde se mastica la tensión en cada fotograma, la caída de un imperio, por lo
que pudo y gracias a Dios que no fue. Y no deja de ser, por mucho que fueran
nazis, escenas estremecedoras. Para colmo la ambientación es extraordinaria,
mostrándonos una derruida ciudad de Berlín a causa de la no capitulación del Führer,
por no hablar de la recreación del búnker.
Interpretación: El que
no fue ni nominado fue Bruno Ganz que, con una enorme interpretación, gran
parte del nivel de la película es gracias a su presencia. Casi podemos ver a
Hitler reencarnado (gestos, posturas, forma de hablar). Muy buenas aportaciones
secundarios del Julianne Kóhler (Eva Braun) y Corinna Harfouch (Magda Goebbels)
y la representada en la en la coherencia del personaje de Doctor Schenk (Christian
Bakel). Como curiosidad, Thomas Kretschmann interpreta aquí a Fagelein general
de las Waffen SS y en “Valkiria” (el proyecto del golpe de estado fallido
alemán), el responsable de la Wehtmatch, más que tuvo un papel importante en
esta situación. Por cierto, también aparecía en “Valkiria”, Bakel.
Escena (spoiler): La secuencia de enorme enfado de Hitler
acusando a todo el mundo de ineptos y traidores es épica. Tanto que incluso se
usa como plantilla para numerosos sketches paródicos de vídeos en YouTube. No
tan intensos pero especialmente significativos son los reveses del Führer ante
los movimientos a su espalda de Goering y Himmler. Llamativa es la de la fiesta
de Eva Braun, un baile enajenado del bombardeo ruso en el exterior. En la parte
final llegan los momentos más míticos. El suicidio, no visto, de Hitler y Eva
Braun tras casarse en una muy breve ceremonia. Cuidado no se llegan a ver si son
sus rostros tras el suicidio. La ejecución mediante engaño y envenenamiento de
los seis hijos de los Goebbels por parte de la madre, Magda, es escalofriante.
Tras lo cual se muestra el mutuo suicidio del matrimonio. Y la escapada final
de los supervivientes ante las tropas rusas y la inminente capitulación del
gobierno nazi. El prólogo y el epílogo corresponden a la verdadera Traud Junge,
secretaria de Adolf Hitler.
LO PEOR: Me
da que su nacionalidad le cerró las puertas a nivel de distribución
internacional. Por no hablar de su no premiación en festivales y certámenes no
fuera que les se les tachara de hacer apología del nazismo. De hecho, yo me
puse muy contento por el Oscar a Alejandro Amenábar y su “Mar adentro”, por ser
español, por gustarme como director y porque la película me parece buena. Pero
al enterarme que competía con “El hundimiento”, lo siento pero creo que ésta lo
merecía más pues la considero una de las mejores películas sobre la Segunda
Guerra Mundial.
CITAS: “A veces lamento haber sido tan bueno”. “Ahora
coma algo, para morir ya habrá tiempo”. “Morir se me antoja sencillo, será tan
solo un momento y después la paz eterna”. “He reflexionado mucho y no quiero
que mis hijos crezcan en un mundo sin nacionalsocialismo”. “De lo que más me
enorgullezco es de haber luchado sin tregua contra los judíos y de haber
purificado nuestra patria de la ponzoña judía”. “Puede que carezcan de
experiencia y no tengan armas pero lo compensan con su fé ciega en la victoria”.
“Solo los mediocres sobrevivirán a esta guerra. Los mejores ya habrán caído”
El pueblo es el
elemento más débil y su aniquilación pertenece a la ley de la naturaleza. Es
algo inevitable”. “La vida no perdona al débil. El estúpido humanitanismo es
una falacia de los curas. La compasión es un pecado capital, sentir compasión
por los débiles es una traición a la naturaleza”.
REFERENCIAS: Está basada en dos libros “El
hundimiento Hitler y el final del Tercer Reich” de Joaquim Fest,
principalmente. Y “Hasta el último momento: la secretaria de Hitler cuenta su
vida” (memorias de Traude Junge), por Melissa Müller. En el cine no son pocas
las películas que tocan la figura de Hitler en su final. Por decir algunas “Hitler
los últimos tres días” y “El búnker”, para televisión con Alec Guiness y
Anthony Hopkins en el papel del dictador, respectivamente
CONCLUSIÓN: 8. Probablemente sea la
mejor aproximación al final del dominio de los nazis y el del propio Hitler,
que puso fin, a su vez, a la Segunda Guerra Mundial.
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