FICHA TÉCNICA
Título: Yellowstone.Guion: John Linson, Taylor Sheridan, Brett Conrad, John Coveny, Eric Jay Beck, Ian McCulloch.
CRÍTICA
SINOPSIS: John Dutton es el propietario del rancho más extenso del país, lo que suscita envidias y codicias por parte de poderosos enemigos. Como patriarca de la familia, lidera la defensa de su imperio con la ayuda de sus hijos, aunque la relación entre ellos no es la mejor.
LO MEJOR: Me sorprende que una serie de este nivel, la mejor que he visto en lo que llevamos de este año, con la gran cantidad de plataformas que existen actualmente, llevando ya tres temporadas, haya llegado ahora, y la tercera aún no lo haya hecho. A su creador, Taylor Sheridan, ya le consideraba uno de los mejores guionistas de hoy en día, como atestiguan los libretos de “Sicario” o “Comanchería”. Pero es que cuando se ha pasado a la dirección también ha resultado sumamente interesante, con “Wind River”. ¿Qué tienen en común estos títulos? Todos contienen elementos del western moderno, o más bien, del neowestern, es decir, el western contemporáneo. Porque Sheridan nos traslada al poderoso rancho de los Dutton y nos muestra todo su funcionamiento, con sus traslados de reses, sus domas de caballos, haciendo un efectivo uso del paisaje natural de Montana. Pero a la vez nos cuenta la lucha de su propietario para conservarlo, en una trama cercana a la de mafias. Sheridan nos hace además un retrato de la América de los cowboys actuales. No es casualidad que los dos antagonistas que tienen los Dutton representen el pasado y el futuro, respectivamente, qué es entre lo que se debaten los ranchos ganaderos norteamericanos. No obstante, “Yellowstone” tiene aroma a serie clásica como las de antes, esas basadas en clanes familiares.
Interpretación: Taylor Sheridan apoya mucho sus guiones sobre los personajes y si éstos están encarnados por un buen reparto, cosa que ha pasado en todos los casos, incluido éste, los actores se lucen. Cómo ocurre con Kevin Costner, en otro papel relacionado con el western, que por fin vemos aprovechado plenamente, cosa que no pasa en el cine. Costner es uno de esos actores que llena la pantalla. Pero es que la nómina de secundarios es sobresaliente. Tenemos a un Cole Hawser muy sorprendente, siempre me ha parecido un actor mediocre pero está ejemplar, y su personaje es uno de mis favoritos. Pero es que también están Kelly Reilly (especialmente inspirada), Wes Bentley (otro desaprovechado en el cine) o Danny Huston, entre otros.
Escena (SPOILERS!!): Sinceramente, lo que más me gusta son las escenas de cómo funciona el rancho, cómo doman los caballos, llevan en el ganado o cualquier otra actividad. Pero hay que tener en cuenta que la serie no va de eso, al menos no únicamente. Y cuando la familia tiene problemas, arregla las cosas como cualquier clan mafioso. Ahí es donde podemos ver ajustes de cuentas como el casi ahorcamiento de Dan Jenkins (Huston), la paliza a Beth (Reilly) o la liberación del nieto de John Dutton (Costner). Pero son muy interesantes los flashbacks cuidadosamente dosificados para conocer los orígenes del imperio y el motivo de las relaciones entre los hijos.
LO PEOR: Incomprensiblemente, ha recibido bastantes malas críticas por parte de la prensa. Cosa que al público le ha dado completamente igual pues es la serie más vista en la televisión por cable y acaba de ser renovada por dos temporadas más, cuarta y quinta. Si es cierto que es un poco culebrón pero es que es precisamente a lo que juega. Y parece que a la audiencia le gusta.
REFERENCIAS:Desde luego podemos adivinar el tono mostrado en el Sheridan director de “Wind River”. Pero la historia viene a ser una especie de “Dallas” del siglo XXI, qué podría tener sus similitudes con otros “culebrones” tipo “Dinastía” o “Falcon Crest”.
CONCLUSIÓN: 8. Es el “Dallas” de este siglo, envuelto en el neowestern que Taylor Sheridan ha cultivado tanto como guionista como director. Serie de estilo clásico que recupera a uno de los mejores actores de los noventa, un gran Kevin Costner.
La he visto en varias listas de posibles aspirantes a los Oscars. Después de verla solo se me ocurre una expresión: tiene que ser una broma. Admito que no soy un entusiasta precisamente de Spike Lee, salvo en algunos títulos no tan descaradamente reivindicativos como “Plan oculto”. Primero le sobra como una de sus dos horas y media de metraje. Pero muy a gusto, porque hay una cantidad de relleno muy importante. Segundo, las escenas bélicas parecen las de un telefilm, por mucho que les cambien el formato y el tipo de fotografía, que quizá es lo único salvable. Tercero, las imágenes de denuncia racista, de Black Lives Matter y de Donald Trump, están claramente añadidas cuando la película ya estaba terminada, parece un corta y pega. Y cuarto, la historia se desarrolla entre la aventura del presente, que es donde mejor funciona, y los flashbacks del pasado donde curiosamente, ¡los personajes están igual! Físicamente son prácticamente iguales. Eso si, Delroy Lindo está que se sale, solo por él me mantuve en la película. Para los Oscars dicen . . . 5.
El cine bélico ha ido incorporando lugares nuevos donde combatir y ya no solo se pueden ver películas de la Segunda Guerra Mundial o Vietnam sino que últimamente han predominado las guerras en Oriente Medio tales como Iraq o Afganistan. Me refiero en las que han estado los Estados unidos. Esta película se basa en una de esas batallas reales en plan “Blackhawk derribado” o “13 horas, los soldados secretos de Bengasi”, sin llegar ni por asomo al nivel de ninguna de ellas pero con la misma premisa de tener en pantalla unos cuantos americanos rodeados por todas partes de enemigos. El caso es que me ha resultado muy entretenida, con muy buen ritmo y mucha acción. Además, es la primera vez que veo a Scott Eastwood con un papel de carácter, con un personaje duro. Debería seguir esa línea. Más dudas me plantea el porque escoger a un actor como Orlando Bloom para tener un rol tan secundario. 6.
Básicamente es una película que te cuenta un robo. La particularidad que tiene es que es perpetrado por un grupo de exmilitares bastante preparados, que además son amigos y que pretenden robar a un importante narcotraficante. La película está muy claramente dividida en tres partes, bastante típicas de esta clase de argumentos, preparación, ejecución y huida. Esa tercera fase es la más larga y además la más interesante por toda la cadena de acontecimientos que va precipitando todo hasta el final en un survival deseperado. Me ha resultado muy entretenida, aunque no lo trepidante que podría haber sido en materia de narración, más que en escenas. Lo que seguramente habría pasado si Kathryn Bigelow hubiera dirigido, pues el proyecto era para ella pero decidió irse a rodar ese peliculón que es “Detroit”. Eso si, el reparto está muy bien, todos ellos. 6.