Es la penúltima película de ese gran actor que es Sean
Connery y que por alguna razón que no recuerdo o no sé, no había visto. Por un
lado trata de las personas que sufren de agorafobia, por otro recurre a la
fórmula de maestro-discípulo pero sobre todo es la historia de una amistad. No
es extraño que tenga ciertas similitudes con “El indomable Will Hunting” pues
comparten el mismo director, Gus Van Sant. Incluso el propio Matt Damon realiza
un cameo como guiño a aquella. Pero lo que me ha resultado interesante es todas
las conversaciones referentes a consejos de como escribir un buen libro, como
instruir al chico en el arte de la narración literaria. Y la posibilidad de
volver a ver a Connery en pantalla, que lleva ya desde 2003 inactivo, y en un rol
en el que no le había visto, teniendo miedo, siendo frágil. 7.
Inspirada en hechos reales sobre una astronauta que tras
volver de un viaje espacial básicamente se le fue la pinza. Pero la película
trata sobre el efecto psicológico que puede tener para una persona la
experiencia de estar en el espacio en la posterior reintegración en la vida
cotidiana terrícola. El director, Noah Hawley recurre a una serie de florituras
visuales (como variar el formato de pantalla entre el 16:9 y el 4:3 en virtud
del estado mental de la protagonista) para introducirnos en escenas que van
desde lo onírico a la alucinación, en ese proceso de desconexión de la realidad
que va sufriendo el personaje. Es interesante, el problema es que es
tremendamente lenta, se hace muy pesada en sus dos primeros tercios y en el
tercero hay un cambio de ritmo demasiado abrupto. Natalie Portman está perfecta
y recuerda a la que ganó el Oscar por “Cisne negro”. Y el reparto no está nada
mal. Pero en conjunto, la película no termina de funcionar. 5’5.
Mira que es raro que con lo que me gusta el cine de Steven
Soderbergh, se me haya pasado ésta. Bueno, la explicación es que es una obra
menor, de muy bajo presupuesto y que ha pasado sin pena ni gloria. Seamos
claros, no está entre lo mejor de su filmografía, más que nada porque tiene
algunos baches en el guion que no le permiten sacar todo el provecho a la idea.
Pero hay dos temas interesantes. Uno es la crítica implícita a ciertas tretas
de los centros psiquiátricos privados. Y otro es el de los acosadores
obsesivos. Ante estas dos situaciones, la protagonista hace que sientas su
impotencia y frustración, porque Claire Foy (una actriz que cuanto más la veo
más me gusta) hace un muy buen trabajo. Por cierto, está rodada íntegramente
con un Iphone. No, no se está moviendo la cámara todo el tiempo. Pero se nota
bastante y le aporta cierto realismo. 6.
No hay comentarios:
Publicar un comentario