Escenas Míticas: Parodias - El jovencito Frankenstein

  

 

   Aquí si estamos ante la que probablemente es la mejor película de Mel Brooks. La escribió junto a Gene Wilder, el protagonista. Hace una parodia, esta vez, sobre el terror clásico, el de la Hammer, más en concreto el del monstruo de Frankenstein. La ambientación es buenísima. Se atrevió hasta con el blanco y negro. Y logró todo un clásico pero de la comedia.

 

 

 

 

   Sin lugar a dudas, es el personaje más gracioso del film. Encarnado fabulosamente por Marty Feldman, Igor es en buena parte en el que se apoyan los puntos más cómicos. Como se puede ver, la ambientación está perfecta. La conversación acerca de la pronunciación del apellido Frankenstein (Fronkostin) no tiene precio.

 



 

 

   Asistimos al momento de la creción del monstruo, interpretado, también de forma espléndida, por Peter Boyle. Curiosa la "digna" forma de afrontar el fracaso del doctor Frankenstein. Por cierto, Gene Wilder está también que se sale.

 



 

 

   En su afán de decirles a sus ayudantes que le pongan una inyección para dormir al monstruo, si puede ser antes de que acabe con el doctor, Igor e Inga no consiguen acertar la "adivinanza" haciéndoselo pasar mal. Es aquí donde Frankenstein se da cuenta que igual el cerebro instalado no es el idóneo.

 



 

 

   Esta forma de mostrar al monstruo guarda cierto parecido con el que se hace en "King Kong", de forma paródica, claro está. El monstruo da bastante el cante, nunca mejor dicho.

 



 

 

   La actriz Madeline Kahn, que interpreta a la prometida del doctor, ya trabajó con Mel Brooks en "La loca historia del mundo". Ésta, después de hacerse la estrecha durante toda la película, cae a las primeras de cambio con el mosntruo. Y parece que queda bastante satisfecha a juzgar por lo visto en la escena.

   En definitiva, un clásico que aún sigue teniendo su gracia y que espero que os haya gustado recordar.