Objetivamente
es una serie que abusa descaradamente del gancho nostálgico.
Recuperando personajes de la saga cinematográfica de “Karate Kid”,
que ya solo les va a faltar resucitar al Señor Miyagi. Claro que
tampoco me extraña, funciona a la perfección por el carisma que
despliegan tanto buenos como malos. También abusa de un guion al
servicio del espectador, dando giros a discreción, los protagonistas
cambian tanto de maestro, estilo de lucha, pareja o incluso padre
adoptivo como de camisa. Donde los alumnos de los diferentes “dojos”
aprenden a pelear en tiempo record. Pero bueno, tampoco es que
oculten sus trucos, es una serie sincera en ese aspecto, que solo
quiere entretener. Y vaya si lo consigue. Creo que he visto todas las
temporadas a base de maratones. La duración de los episodios, de
aproximadamente media hora, lo facilita. Pero
sobre todo lo tremendamente adictiva que es. En ese sentido, ésta es
la temporada que más me ha gustado, me lo he pasado bomba. Además,
el nivel de los combates de artes marciales, sean callejeros o de
competición, ha subido, a nivel coreográfico. Y, aunque ya digo que
es un mero entretenimiento, me parece interesante la premisa que
trata sobre que los acosados
se convierten en acosadores.
7.
Ha
mejorado ostensiblemente respecto a la primera temporada, que ya me
gustó pero que había que reconocer que tenía sus fallas, sobre
todo en cuanto a dos aspectos. Uno de ellos es que aquí la cartera
estaba más llena y no solo hay más dinero, sino que además lo
lucen a la menor oportunidad, en forma de efectos especiales. El otro
es la estructura narrativa de la historia, más sujeta a la
linealidad temporal, aunque con algunas elipsis bastante abruptas,
pues ya ha entrado en la trama troncal de las novelas y es más
palpable que la anterior temporada solo era una introducción. No
obstante, la adaptación de la saga literaria está siendo más bien
libre. Sigue algunas pautas de la novela “La sangre de los elfos”
pero mezclando, supongo, con el videojuego, porque en los libros no
hay tanto monstruo y en la serie casi en todos los episodios. Pero no
seré yo quien ponga una pega a ésto, me encantan los bichos. El
reparto también ha crecido. A estas alturas ya no se puede imaginar
a otro Geralt de Rivia que no sea Henry Cavill. Y Freya Allan
adquiere más protagonismo porque su Ciri va evolucionando. Otro
aspecto que se diferencia de los libros son las veces que interactúan
Geralt, Ciri y Yennefer, cuando en realidad no deberían verse casi
en toda la historia. Lo entiendo, además no me molesta que tome la
serie su propio camino, no hay que obsesionarse con la fidelidad, son
medios distintos. 7’5.
Pues
me he llevado una sorpresa porque no me esperaba mucho después de
fiascos como “Falcon y el soldado de invierno” o “Que pasaría
si”, así que Marvel/Disney, en sus series post-Vengadores, sigue
cumpliendo la regla de una buena, una mala. Y ésta tocaba buena y se
ha confirmado. Porque sin hacer gala de despliegue de efectos
especiales espectaculares logra una historia muy entretenida, apoyada
en el desarrollo de sus personajes, que están interpretados por un
buen reparto, porque ya Jeremy Renner me parecía mejor actor que la
mayoría de los otros Vengadores, aunque su rol fuera menor. Pero es
que también está Vera Farmiga y la que me parece realmente la
protagonista y que es una actriz con un futurazo, Hailee Steinfeld.
Además, su química con Renner es total y casi parece una buddy
movie, sin pasarse con el humor y con muy buenas coreografías de
peleas, que han rodado bien, quiero decir, que se ven bien. Para
colmo hay dos apariciones sorpresa más, una de ellas un poco cantada
tras apuntar a ello en la escena postcréditos de cierta película, y
que me parece un gran acierto. Y está chulo el juego que dan con lo
de las puntas de flecha y los trajes de superhéroes. Así que, muy
bien, comienza lenta pero luego es de las que apetece ver en maratón.
7.
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