domingo, 27 de octubre de 2019

Los muertos no mueren



   FICHA TÉCNICA

Título: Los muertos ni mueren.
Dirección: Jim Jarmusch.
País: Estados Unidos.
Año: 2019.
Duración: 103 min.
Género: Comedia, terror.
Interpretación: Bill Murray, Adam Driver, Tilda Swinton, Chloë Sevigny, Steve Buscemi, Danny Glover, Caleb Landry Jones, Rosie Pérez, Iggy Pop, Sarah Driver, RZA, Selena Gomez, Carol Kane, Tom Waits, Austin Butler, Luka Sabbat, Sturgill Simpson, Alyssa Maria App, Sid O'Connell, Kevin McCormick, Justin Clarke, Vinnie Velez, Lorenzo Beronilla, Talha Khan, Mick Coleman.
Guion: Jim Jarmusch.
Producción: Joshua Astrachan, Carter Logan.
Música: SQÜRL.
Fotografía: Frederick Elmes.
Distribuidora: Focus Features.

   CRÍTICA

   SINOPSIS: En un pequeño pueblo americano llamado Centerville se produce un extraño fenómeno medioambiental que da lugar a la resurrección de los muertos. El sheriff y sus ayudantes deberán hacerles frente, aunque no sepan muy bien como.
   LO MEJOR: Hay directores que eso de la taquilla les da literalmente lo mismo. Para ello manejan presupuestos tan pequeños como que un fracaso de público no le suponga la ruina. ¿Cómo consiguen entonces tener repartos tan nutridos como el de esta película? Pues granjeándote un prestigio como director especial, un autor con estilo personal, de tal manera que los actores quieran trabajar con ellos, no basándose en el sueldo sino en la obra. Jim Jarmusch es uno de esos directores, uno de esos que no se adhiere a las modas y donde otros habrían montado un apocalipsis zombie repleto de acción y gore, él realizan homenaje a la serie B ( casi Z) más cutre, en clara referencia a las películas de tipos como Samuel Fuller (hay un guiño muy claro) o Ed Wood, a través de una parodia muy divertida pero solo si eres capaz de engancharte a ese peculiar humor de Jarmusch. Éste sabe que los que no lo hagan, y serán bastantes, rechazarán la película. Y para colmo, su lentitud tampoco le hará ganar adeptos. Pero es igual, lo que quiere es hacer un pequeño retrato de la América profunda y de uno de esos diminutos pueblos perdidos en ella, y ese ritmo pretende reflejar la actividad en esas zonas, por eso hace que la historia y sus personajes vayan como a cámara lenta. Por lo tanto, es cine para un reducido público, tan paciente como para reírse de diálogos que, a menudo, no van a ninguna parte y situaciones entre lo absurdo y lo surrealista. Pero si se sabe leer entre líneas podemos ver los mensajes, como el ecologista (la delirante explicación del apocalipsis) o dejando ver que ya somos zombis (esos muertos mirando el móvil) en vida.
   Interpretación: La pareja formada por Bill Murray y Adam Driver es impagable. La química entre ambos es total. Luego tenemos dos personajes femeninos interpretados por dos actrices, aunque por separado,  que están geniales, Chloe Sevigny y Tilda Swinton. Varios de ellos repiten con Jarmusch. Tenemos un tercer grupo de secundarios con Steve Buscemi, Danny Glover y Caleb Landry. Todos en la línea del resto del reparto. Y luego unos cuantos cameos, como los de Iggy Pop, Rosie Pérez y Selena Gómez.
   Escena (SPOILER!!): Hay un buen número de situaciones que cuanto más absurdas más graciosas. Como el ataque a las dos mujeres en la cafetería. La escena en la que van viendo los cadáveres de ellas, por turnos, Bill Murray, Adam Driver y Chloe Sevigny, sacando exactamente la misma conclusión: “¿Un animal?¿Varios?”  es de troncharse. Pero es esa clase de humor. Y cuando están esos tres en el coche patrulla rodeados de zombis y Chloe Sevigny, en un arrebato de locura, al ver a su abuela convertida, sale del coche a grito de “abuelita” y es atacada por la masa de muertos. Incluso se coquetea con la cuarta pared, cuando Driver confiesa haber leído el guion (de Jarmusch) y conocer ya el final, qué será fatídico. Lo del platillo volante que viene a buscar a Tilda Swinton es una ida de olla de considerables dimensiones. Y el final, con los protagonistas rodeados en un claro guiño al cine de zombis.
   LO PEOR: Quién vaya buscando una comedia desternillante y muchas acción, ya se puede ir a olvidando. No es “Bienvenidos a Zombieland” ni “ Zombis party”, ni tampoco lo pretende. Incluso renuncia al efecto de la sangre (a la que sustituye por una especie de ceniza) y al gore.
   CITAS: “¿Qué ha podido ser? ¿Un animal salvaje? ¿Varios?”. “Seguramente sea lo más horrible que he visto en mi vida”. “¿En que piensas? Pienso en zombis”. “Ésto no acabara bien”. “Lo sé porque he leído el guion y sé el final”. “Les atraen las cosas que hacían cuando estaban vivos”. “Bienvenidos a mi mundo, zombis”. “
   REFERENCIAS: Pues es la más evidente de las películas de apocalipsis zombis de los setenta, y a la serie B en general. Hay varias veces que se menciona, de hecho, a George A. Romero. Incluso en una de las lápidas del cementerio pone el nombre de Samuel Fuller.
   CONCLUSIÓN: 6’5.Un homenaje a la serie B, en su vertiente de cine de zombis, através de la parodia y el particular sentido del humor de Jim Jarmusch. El reparto está impagable.



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