FICHA TÉCNICA
Película: Jurassic
World 2, el reino caído.
Dirección: J.A. Bayona.
País: Estados Unidos.
Año: 2018.
Duración: 128 min.
Género: Ciencia
ficción, aventuras, acción.
Interpretación: Chris
Pratt, Bryce Dallas Howard, James Cromwell, Rafe Spall, Toby Jones, Justice
Smith, Daniella Pineda, Ted Levine, Geraldine Chaplin, Jeff Goldblum, BD Wong,
David Olawale Ayinde, Bobbi Jo Hart, Daniel Stisen, Robert Emms, Kamil
Lemieszewski, Michael Papajohn, Peter Jason, Sean Gislingham, Max Baker, Faith
Fay, Kevin Layne, Daniel Eghan, Ronan Summers, Deborah Rock, Charlie Rawes,
Manoj Anand, Cory Peterson, Fran Targ, John Heartstone.
Guión: Colin
Trevorrow, Derek Connolly (Personajes: Michael Crichton).
Producción: Belén
Atienza, Frank Marshall, Patrick Crowley.
Música: Michael Giacchino.
Fotografía: Óscar Faura.
Distribuidora: Universal
Pictures.
CRÍTICA
SINOPSIS: Tras el desastre del Jurassic World, la
isla fue abandonada y los dinosaurios se adueñaron de ella. Ahora una erupción
volcánica amenaza con acabar con todos ellos. Por lo que se organiza una misión
de rescate de los animales. Aunque las intenciones no son tan buenas como
parecen.
LO MEJOR: Ya se le adivinaban los guiños a las Monter-movies
del director español en su anterior proyecto y vaya si lo ha confirmado con
esta película. Casi podría definirse como el “Spielberg español” y prueba de
ello es que muy probablemente haya firmado la mejor secuela de la saga hasta la
fecha. Quizá esta afirmación les haga a algunos a llevarse las manos a la
cabeza. Pero Juan Antonio Bayona tiene muchos de los rasgos cinematográficos
del “Rey Midas” de Hollywood. Ésto es, en cuanto a los dinosaurios se refiere,
un tratamiento de esos animales, por un lado entrañables y por otro
terroríficos. Bayona trae cosas que reconocemos de su corta pero intensa obra
anterior, un sentido primordialmente dramático, con varias escenas puramente
conmovedoras que te encogen el corazón, pero a la vez capaz de dotar a otras de
un suspense marca de la casa. Como en las dos primeras películas de la saga, las
de Spielberg, los dinosaurios vuelven a ser monstruos. Sin dejar de ser un film
de aventuras con el espectáculo como uno de sus objetivos principales, el tono
ya no es tan festivo, sino que Bayona firma la secuela más seria y oscura y
también tenebrosa, y por tanto, menos infantil. Da la sensación de haber visto
una película de terror, de serie B, para
más señas en su segunda mitad incluso con un aire gótico. Porque representa un
verdadero cambio de tercio si atendemos al cambio que supone el escenario, por
primera vez abandonamos la isla y su entorno natural. Pero además tiene un
mensaje claramente ecologista y animalista continuando el discurso sobre la
clonación y la intervención humana en la creación de los dinos, y mostrando al
hombre como el verdadero depredador de la naturaleza. Para colmo, hay más
especies distintas que nunca, claro que sólo los frikis de estos animales los
podrán reconocer.
Interpretación: Chris Pratt y Bryce
Dallas Howard se confirman como una de las parejas de aventuras con más química
del cine actual. Aunque es cierto que Pratt se sale poco de la imagen de la
entrega predecesora y es más el personaje de Bryce el que evoluciona. Hay
secundarios de buen nivel como James Cromwell, Toby Jones, Geraldine Chaplin (estoy seguro que a petición
expresa de Bayona), y Ted Levine (el “Buffalo Bill de “El silencio de los
corderos”) nuevamente de villano. Y tenemos el cameo de uno de los ilustres de
la saga, Jeff Goldblum. ¿Para cuando el de Sam Neill o Laura Dern?
Escena (spoiler): Hay tantas que apenas
voy a poder tan solo mencionarlas. El prólogo ya es toda una declaración de
intenciones. Ya se percibe ese tratamiento más cercano al terror. Por supuesto
el reencuentro entre Chris Pratt con Blue, la verdadera protagonista de la
película. Como en los vídeos de aprendizaje cuando es pequeña. Toda la parte de
la erupción volcánica, con una brutal estampida de dinosaurios ladera abajo que
termina con una de las escenas más duras de la saga, cuando se alejan en el
barco y ven como los animales que no han logrado escapar van a sucumbir, con
sus gritos, me puso la carne de gallina. Típico de Bayona. La extracción de sangre
del tiranosario para salvar a Blue. La debacle que se forma con la irrupción de
los dinos en la subasta. Una de las más fuertes es cuando Ted Levine entra en
la jaula del Indoraptor para quitarle un
diente y éste despierta arrancándole un brazo y después juega con el como si
fuera un muñeco de trapo. Y nuevamente drama en el dilema sobre dejar escapar a
los animales o dejarlos atrapados ante una muerte segura. Sin olvidar todo el
duelo de Blue con el Indoraptor. Y cuidado que aquí es la primera vez que hay
una escena post-créditos que remarca lo que apuntan algunos momentos del final,
como la del megalosaurio saliendo de una ola en medio de los surfistas. Vamos
que los dinosaurios llegan a la civilización.
LO PEOR: Me pasa lo mismo que con “Los Últimos Jedi”
que no entiendo a la gente. Si la película tira por lo clásico, se la acusa de
nostálgica y poco original. Si cambia el chip, que traiciona el espíritu y no
sé qué monsergas más. Vivimos en la época más “hater” de la historia y no
termino de adaptarme. Si acaso, si diría que me habría gustado más sangre,
aunque entendiendo que la calificación por edades es un cinturón que aprieta
demasiado.
CITAS: “Usted conoce a alguien que podría
ayudarnos”. “Una operación de rescate, ¿Qué podría salir mal?”. “Usted demostró
que los raptores obedecen órdenes”. “Ésta es la criatura más peligrosa que haya
caminado sobre la tierra”. “Si no logro volver, no olvides que tú me hiciste
venir”. “Esos seres estuvieron aquí antes que nosotros, y si no tenemos
cuidado, estarán aquí también después”.
REFERENCIAS: Tiene elementos
cercanos, en cuanto a las escenas de suspense, a “Jurassic Park” y “El mundo
perdido” de Spielberg, seguramente uno de los referentes de Bayona. También el
cine de monstruos de serie B. Y un toque “King Kong”. Esta segunda saga de
“Jurassic World” se encamina hacia lo que se pronosticaba con la palabra
“World”, para lo cual “El reino caído” es el puente necesario entre la primera
y la siguiente, que volverá a dirigir Colin Trevorrow.
CONCLUSIÓN: 8’5. Bayona rinde
homenaje a Spielberg, los dinosaurios vuelven a ser monstruos.
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