FICHA
TÉCNICA
Película: Molly's
Game.
Dirección: Aaron Sorkin.
País: Estados Unidos.
Año: 2017.
Duración: 141 min.
Género: Drama,
intriga, thriller.
Interpretación: Jessica
Chastain, Idris Elba, Kevin Costner, Michael Cera, Samantha Isler, Chris O'Dowd,
Graham Greene, Jeremy Strong, Bill Camp, Brian d'Arcy James, Claire Rankin,
J.C. MacKenzie.
Guión: Aaron
Sorkin (Memorias: Molly Bloom).
Producción: Mark
Gordon, Amy Pascal, Matt Jackson.
Música: Daniel Pemberton.
Fotografía: Charlotte Bruus
Christensen.
Distribuidora: STXfilms.
CRÍTICA
SINOPSIS: Molly
Bloom se pierde las Olimpiadas por una lesión. Por lo que decide trasladarse a
Los Ángeles para estudiar derecho. Pero en lugar de eso, gracias a su visión de
negocio y su inteligencia, se convierte en “la princesa del póker” organizando
partidas para las personas más importantes del país y llegando a ganar millones
de dólares.
LO MEJOR: El nombre de Aaron Sorkin ya en si es
una referencia con identidad propia tanto en el mundo del cine como en el de la
televisión, aunque hasta el momento solo en su faceta de guionista, tal es su
relevancia en dicho rol, sin haberle visto en otros como la producción o la
dirección. Es por eso que tenía cierta expectación ahora que ha decidido dar el
salto como director. Hay muy buenos guionistas que luego son directores del
montón. No es el caso de Sorkin, pues su
primera película no solo tiene su inconfundible sello personal, sino que además
se marca algunos toques de talento en la dirección. En cuanto a ser un film
“made by Aaron Sorkin”, posee esos brillantes diálogos extensos y vertiginosos,
donde cada frase es como un puñetazo y se advierte la riqueza lingüística. Pero
es que, además, se destapa como un narrador muy sólido, que tiene plena
seguridad (no es para menos) en el texto que él mismo ha escrito y que lo
ejecuta con enorme nervio, bajo un vibrante ritmo que se apoya en una
extraordinaria labor de montaje. Sorkin nos trae un biopic sobre el éxito y
caída de una de esas figuras hechas así mismas y para ello nos introduce en el
mundo de las partidas de póker, que no en el póker, destapando todos los
entresijos de una de las pasiones de gran cantidad de estrellas hollywoodienses
(eso sí, manteniéndolas en el anonimato). Pero para no aburrir al espectador
con demasiado detallismo (que le hay) convierte lo que podría haber sido un
biopic al uso en un thriller de intriga. Por cierto, el guión optó al Oscar, y
bien podrían haber considerado otras categorías.
Interpretación: Si Sorkin muestra su
confianza en su libreto, no demuestra menos con su personaje principal y la
actriz elegida para encarnarlo. No es para menos, no es un secreto (si soléis
leerme) que considero a Jessica Chastain una de las tres mejores, si no la
mejor, del momento. Siempre está a un nivel extraordinario. Pues bien, igual
ésta es una de las mejores interpretaciones de su carrera. Y eso que,
incomprensiblemente no fue nominada. Eso sí, aunque ella es el motor de la
historia, está excelentemente respaldada por Idris Elba, hasta el punto de que
son sus escenas en común lo más destacado del film. Podemos ver a Michael Cera,
creo que, por primera vez, en un papel alejado de lo cómico. Y también como
secundario a Kevin Costner. Es una pena que se conforme con aparecer tan poco.
Escena (spoiler): Me parece brillante
toda la explicación del principio cuando nos cuenta en un original prólogo
porque fracasó como esquiadora. Vital para el desarrollo de la trama es la
primera partida en la que interviene. Después vendrá cuando coge el mando
organizando timbas en un prestigioso hotel. Y reinventándose cuando es
traicionada usando como ganchos para obtener nuevos jugadores a playmates. Pero
ya decía que las escenas Chastain-Elba eran de lo mejor. Como la vista preliminar
donde decide representarla, o varias de las charlas del despacho. Y por
supuesto, el final donde sale absuelta con una pena mínima. Pero tiene mucho
sentido esa secuencia con Molly Bloom niña donde su padre (Costner) le pregunta
un sinónimo de “cansada” cuando ella le pide parar de practicar esquí, y ella
contesta “débil”.
LO PEOR: Lo mejor del estilo Sorkin podría ser
también lo peor para algunos. Es tan vastísima la información con la que se ha
documentado que puede llegar a salir por las orejas. Quizá por ello el metraje
se haya ido hasta los 140 minutos y resulten excesivos. Sobre todo, porque ese
ritmo tan alto para dar el efecto de entretenida pueda ser agotador.
CITAS: “Crecí para ser campeona. Mi objetivo
era ganar. En qué y contra quién, esos eran solo detalles”. “La humillación
había dado paso a una cegadora ira por mi impotencia. No iba a esperar antes de
poner en marcha un plan”. “Alguien dijo que lo peor que le podía pasar a un
deportista es salir cuarto en las Olimpiadas. ¿En serio? Vete al diablo”. “No tengo
héroes. Porque si alcanzo las metas que me propuse mi heroína será la persona
en la que me convierta”. “"Den una propina a Molly". En el fondo, no
me gustó cómo sonó”. “Si crees que una princesa puede hacer lo que hice, te
equivocas”. “Yo era una gran estudiante y esquiadora en todos lados salvo en mi
casa”. "No violes la ley cuando la estés violando". “Si hubiera un
peor jugador del mundo Brad se las arreglaría para perder con él”. “Soy un
ganador atrapado en el cuerpo de un... perdedor”.
REFERENCIAS: Quizá por ser también
protagonizada por Jessica Chastain y tener unos diálogos de agilidad similar,
me ha recordado a “El caso Sloane”. Aunque el prólogo lo ha hecho a “Yo,
Tonya”. Pero, en general, tiene en la narración y el montaje toques del estilo
de Oliver Stone o Martin Scorsese.
CONCLUSIÓN: 7’5. El brillante debut
en la dirección de uno de los guionistas más prestigiosos de Hollywood, Aaron
Sorkin, que se alía con una magnífica Jessica Chastain.
No hay comentarios:
Publicar un comentario