Los Libros de Zoe: El silencio de la ciudad blanca

   AUTOR: Eva García Sáenz de Urturi (Vitoria,1972). Publicación: 2016. Género: novela negra. El silencio de la ciudad blanca, un inquietante thriller ambientado en su ciudad natal, ha supuesto un gran éxito de crítica y ventas en nuestro país y cuyos derechos de traducción ya han sido vendidos a Alemania e Italia así como en proceso de adaptación cinematográfica. Con El silencio de la ciudad blanca arranca una trilogía de la que “Los ritos del agua” es la segunda entrega.

   SINOPSIS: El silencio de la ciudad blanca comienza con la salida de prisión de un brillante arqueólogo acusado de cometer varios crímenes con rituales misteriosos dos décadas atrás y unos días antes de su excarcelación vuelven a cometerse crímenes muy parecidos, todos ellos son de tinte ritual, y conectados a leyendas, mitología e historia. Así la novela comienza con un dilema imposible.

   PERSONAJES: Los personajes se encuentran muy bien definidos y son indispensables en la historia. El protagonista, Unai López de Ayala, alias, Kraken. Gracias a él, la novela logra una calidad y atractivo extraordinario, ya que desde el inicio nos sorprende su excesiva seriedad en el empeño en cumplir con su deber a toda costa, y su lucha con su pasado que empaña y complica su presente. Un personaje muy completo y con el que se empatiza rápidamente. Estíbaliz: compañera de Unai. Representa la objetividad y obviedad frente a lo que está ocurriendo. Alba Díaz de Salvatierra: la refinada y serena teniente que mantiene una especial relación con el protagonista sin que ello le influya en la investigación. Para terminar, destacar otros dos personajes, el hermano de Unai, Germán y el abuelo de ambos, que se hizo cargo de ambos cuando murieron sus padres. Representa la firmeza y la ternura al mismo tiempo, así como una mente clara y centrada que solo tienen aquellos que han visto mucho en la vida.

   LO MEJOR: Se percibe en la novela una aguda labor de documentación que demuestra un gran conocimiento de las técnicas forenses y del trabajo policial, con un cuidado elegante en el ritmo, una detallada descripción de los escenarios sin caer en excesivos detalles que podrían entorpecer la lectura y hacerla tediosa, unas hábiles individualizaciones de los personajes y una lúcida estructura repleta de giros narrativos. La autora ha pulido una novela hipnótica, inteligente, colmada de mitología y retos intelectuales para el lector. Se agradece que la novela va al grano desde el primer capítulo, resulta sencilla de leer, hasta el punto de que te engancha y sorprende. Los diálogos y la cuidada narrativa de la autora estimulan en el lector sensaciones a flor de piel. La amistad, el compañerismo, la lealtad, la música y el amor envuelven una historia sombría y muy muy perturbadora.

   CITAS: ”Toda esta serie de asesinatos mantiene un elemento inexplicable a primera vista: parecen obra del mismo asesino, pero el asesino está en la cárcel” “La gente herida es peligrosa, porque sabe que puede sobrevivir”. “A veces la memoria clava chinchetas en momentos triviales del pasado y los fija para siempre, aunque "para siempre" parezca mucho tiempo”. “A veces el tiempo que marca el calendario no tiene nada que ver con el tiempo mental o emocional que cada uno vive por dentro”. “Hay personas que saben encajar los golpes, aprenden a recibirlos una y otra vez, esa es su fortaleza. Pero no saben huir, la sola idea de un mundo desconocido las paraliza” “Comprendí que el dolor también une a las personas, tal vez más que las alegrías, porque de esas, como buenos desagradecidos que todos somos, nos olvidamos pronto” “He aprendido por las malas que un cúmulo de casualidades no te guía necesariamente a la verdad.”

   LO PEOR: La trama es bastante retorcida, pero quizá por eso mismo deja muchas lagunas, hay detalles que chirrían y ciertos aspectos que quedan sin explicación. Eso sí fascinar, fascina y mucho.

   CONCLUSION: En cuanto a la construcción y la solidez de la obra, la escritora alavesa encauza y sabe cómo jugar con el tiempo narrativo. El ritmo sigue una ascensión paulatina que de forma gradual, nos introduce en una noria de acontecimientos imposible de la que es imposible escapar. En otro orden de cosas, el final abierto de cada capítulo invita al lector a seguir y seguir leyendo ante un relato impredecible hasta la última página. Una novela negra cautivadora que se mueve entre la mitología y las leyendas de Álava, la arqueología, los secretos de familia y la psicología criminal. Un noir refinado y complejo que nos enseña cómo los errores del pasado pueden intervenir en el presente. Una novela cuyo eje central es el argumento que cuenta, esto es, se trata de resolver un asesinato por parejas cuyo modus operandi es idéntico a los que se produjeron hace 20 años. Asesinaron a niños recién nacidos, de cinco años, diez y quince, sucesivamente y siempre por parejas. El culpable está en prisión, y fue su propio gemelo quien los detuvo. Si ahora comienzan de nuevo los asesinatos ¿será que tiene un admirador, se equivocaron de culpable o el asesino ha convencido a alguien que los haga por él para que lo exculpen? Muy recomendable.