Escenas Míticas: Videojuegos - Lara Croft: Tomb Raider

   Se estrena de forma inminente lo que parece ser un reinicio de la saga (bueno solo dos entregas), es decir, un reboot. Y no una secuela, como se había pensado en un principio. Esta vez, se llamará a secas “Tomb Raider” y está dirigida por el noruego Roar Uthaug (“La ola” y protagonizada por Alicia Vikander como Lara Croft, acompañada de Dominic West y Kristin Scott Thomas.

   Voy directo al grano. Me ha sorprendido, pero mucho la elección de Alicia Vikander como la nueva Lara Croft. Desde luego en cuanto fidelidad a la imagen del personaje original del videojuego no puede estar más alejada estéticamente del físico, muy marcadamente característico de la mítica “asaltatumbas”.

   Y lo siento por darle tanta importancia a este tema, pero el físico ya fue el motivo principal de polémica para la elección de la actriz para el papel la anterior vez. Tan capital era el tema que llegó a considerarse la opción de Linsey Dawn Mckenzie, una actriz porno, como os podéis imaginar, muy generosa en sus medidas. Hasta este punto primaba el tema estético sobre el talentoso. También se planteó a Demi Moore.

   Al final recayó en Angelina Jolie, quien, a pesar de ser criticada en un principio, terminó por convencer al público. Yo personalmente creo que fue una elección acertadísima. La Lara Croft del videojuego es extremadamente delgada, pero con unas curvas tremendas (exageradas diría yo), especialmente en cuanto al pecho. Angelina Jolie cumplía perfectamente con esa premisa. Y encima era una buena actriz. Sin embargo, Alicia Vikander es una chica si, muy talentosa, pero físicamente muy delgada y sin nada de curvas para poder identificarla como Lara Croft.

   Pero vayamos al personaje, Lara Croft, dejando aparte su imagen claramente sexualizada, es una mezcla entre aventurera a lo Indiana Jones y heroína de acción a lo Alice de “Resident Evil” (curiosamente otro videojuego). Es tremendamente atlética y poderosa físicamente (me refiero en cuanto a fuerza). La interpretó una Angelina Jolie que venía de ganar el Oscar como actriz de reparto en “Inocencia interrumpida” y de salir en “60 segundos”.

   Ahora se encuentra retirada (no sabemos si definitivamente (parece que puede volver a la gran pantalla el año que viene) muy inmersa en proyectos alejados del cine, de tipo solidario. Por no mencionar su sonada separación de Brad Pitt. En el reparto la acompañaban Daniel Craig (muy pre-James Bond), Ian Glenn(ahora muy popular por la serie “Juego de tronos”) y el veterano Jon Voight como padre de Lara.

   Básicamente la película es un encadenamiento de escenas de acción muy molonas pues el videojuego tampoco tiene mucho más en cuanto a trama. Aunque si quisieron tocar en el argumento el tema de la masonería, más concretamente en cuanto a los Iluminati. El director fue Simon West, de la cantera de directores jóvenes de blockbuster de acción de la factoría Jerry Bruckheimer/Don Sompson, a quien hicieron debutar en “Con Air”.

   Tuvo mayoritariamente críticas negativas, pero en taquilla no funcionó mal. Costó 115 millones de dólares y recaudó 275. De hecho, dio para una secuela, “Tomb Raider, la cuna de la vida”, con Jan de Bont (Speed) al frente esta vez y Gerald Butler en el reparto. Las críticas fueron todavía peores, pero en taquilla volvió a salvarles (costó 95 y recaudación 156), más ajustada esta vez. La Jolie decidió bajarse del tren y la saga quedó ahí hasta ahora.

            Aun así, el personaje ha generado 13 videojuegos, 2 comics y, hasta el momento, 3 películas. No es que esté mal.