Teniendo
en cuenta todo lo que viene ocurriendo desde el estreno, va a ser
inevitable que las palabras Snyder's Cut no aparezcan. Es más, gran
parte del artículo va a ir en esa línea. No en vano se perfila como
uno de los eventos más importantes del próximo año. Pero sobre
todo porque los resultados de crítica y público de esta película
hicieron que la franquicia frenara en seco, y precisamente el
“Snyder's Cut” podría reactivarla.
Todo
comienza con la peor tragedia que seguramente puede sufrir un padre,
la muerte de la hija de Zack Snyder, que para colmo trágico fue por
suicidio. Eso obligó al director a dejar el rodaje a mitad de su
“Liga de la justicia”. Además, Snyder tenía pensado hacerla en
dos partes y rodarlas juntas, aunque después estrenara quizá con
un año de separación, por lo que cuando abandonó, había rodadas
partes de ambas películas.
Lo
que llevó a su sustituto, Joss Whedon, qué había sido contratado
por el propio Snyder como guionista junto a Chris Terrio, el cual ya
había participado en “Batman v Superman”, a plantearse si
terminar lo que ya estaba empezado pero que suponía un caos, o hacer
borrón y cuenta nueva, y en lugar de rehacerla, hizo una película
desde cero.
El
resultado no fue ni muchísimo menos tan catastrófico como muchos la
pusieron. De hecho, es una buena película de superhéroes, muy
entretenida y divertida, con espectaculares escenas de acción,
aunque no memorables, pero olvidable, Whedon realizó un producto
considerablemente más ligero que lo propuesta hasta entonces, de
un tono más trascendental y grave. “La liga de la justicia” de
Joss Whedon es comida rápida. Y lo que pretendía hasta la fecha Zack Snyder un
solomillo.
Es cierto que hay solomillos que se pueden atragantar pero esa era la línea
creativa hasta el momento y Whedon rompió con ella, mostrando una
versión más marvelizada. Porque ahí radica la diferencia entre DC
y Marvel. Snyder nunca habría consentido una película tan luminosa
en cuanto a fotografía y con tanto humor, tanto chiste fácil.
La
película no fue un fracaso de taquilla. Costó 300 millones de
dólares y recaudó 650, que no es perder dinero pero da un mensaje
muy claro de que la cosa no va bien. Por cierto, una de las peores
conclusiones que se pueden dar es que para ser una de las películas
más caras de la historia, su presupuesto no luce como tal. Da la
impresión que el dinero se ha ido en estupideces cómo hacer al
villano, Steppenwolf, totalmente digitalizado cuando no era necesario o borrarle el bigote a Henry Cavill, al que llamaron cuando estaba rodando "Misión imposible 6".
La cuestión es que posibilitó una gran campaña de pedida de la versión de Zack Snyder, el cual claramente reniega del trabajo de Whedon. De hecho, a su vuelta, la siguiente película de la saga, "Aquaman", ya recupera el tono y el camino marcado por él, pues el propio director, James Wan, enseñaba constantemente cortes de la película al director de "300" para que le diera su aprobación. Pero ya lo he dicho antes, me parece una incongruencia estar pidiendo la versión de Snyder cuando tanto se criticó su "Batman v Superman", pues evidentemente va a ir en esa línea.
Al menos eso se desprende de los adelantos que está ofreciendo a cuentagotas el cineasta, como la fotografía más oscura, la música de Junkie XL, la posible aparición del villano Darkseid, el traje negro de Superman, . . . Sea lo que sea, lo veremos en septiembre (en principio) en una miniserie de cuatro episodios de una hora cada uno, en la plataforma HBO Max, aunque se rumorea que podría estrenarse simultáneamente en cines, como es la estrategia de Warner en todos sus estrenos de 2021 y que está ocasionando un terremoto de reacciones entre sus estrellas, directores y productoras asociadas.
Lo que no he dicho es que para esta película repetían Henry Cavill, Ben Affleck, Gal Gadot, Amy Adams, Diane Lane, Jeremy Irons y Connie Nielsen (introducida ya en el spin off de Wonder Woman). Y se incorporaban los nuevos miembros de la Liga de la Justicia, Ezra Miller (Flash), Jason Momoa (Aquaman) y Ray Fisher (Cyborg), que ya tuvieron su cameo en "Batman v Superman". Al igual que se podía ver a Amber Heard como adelanto de "Aquaman", o a JK Simmons como Gordon.
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