The sinner

   FICHA TÉCNICA

Título: The Sinner.

Dirección: Antonio Campos.

País: Estados Unidos.

Año: 2017.

Duración: 45 min (8 episodios).

Género: Thriller, intriga.

Interpretación: Jessica Biel, Bill Pullman, Christopher Abbott, Teri Wyble, Patti D'Arbanville, Abby Miller, Eric Todd, Dohn Norwood, Robert Funaro, Devin McGee, Michael H. Cole, Gretchen Koerner, Ruby Barnes, Leslie Fray, Katelyn Farrugia, Meredith Holzman, Sunshine Tovar, Anna Elizabeth, Stephanie Olah Kelly.

Guión: Derek Simonds (Libro: Petra Hammesfahr).

Producción: Derek Simonds.

Fotografía: Jody Lee Lipes.

Distribuidora: Netflix.

   CRÍTICA

   SINOPSIS: Una mujer que está en la playa pasando la mañana con su hijo y su marido, de repente, ataca a puñaladas a un chico que está cercano a ellos, matándolo. Ella afirma que no sabe porque lo ha hecho. Un veterano policía comienza a investigar su pasado para ver si puede conseguir averiguar algo que explique ese acto.

   LO MEJOR: Recuerdo cuando ver a un actor o actriz de cine en una serie de televisión era sinónimo estar acabado y pasar por un periodo en el que no tenía mucho trabajo. Pero quizá estamos en la Edad de oro de las series, las cuales han elevado al nivel exponencialmente y ahora sirven para dar prestigio y otro registro al intérprete, e incluso como redención y resurrección. Que se lo digan si no a Matthew McCounaghey. Pero también hemos visto en este formato a gente de la talla de Nicole Kidman, Tom Hardy, Eva Green, etc. Y gran parte del éxito se debe a la libertad creativa con la que gozan sus directores y guionistas, elaborando muy variadas tramas, desde puntos de vista originales y arriesgados. De tal manera que pueden surgir planteamientos como el de “The sinner”, donde asistimos a la composición de un rompecabezas, reconstruyendo la historia de un crimen a través de un sistema de flashbacks que funciona a la perfección, pero donde la incógnita del “quien” se despeja apenas media hora después de comenzar el primer episodio y es más bien el “porque” lo que ocupa la intriga que mantiene admirablemente hasta prácticamente el final. Pero en el camino a la resolución nos encontraremos con temas como las secuelas mentales, los traumas del pasado, la educación religiosa, la represión parental, el chantaje emocional. Lo sé, tampoco es nada nuevo bajo el sol, pero la sencillez con la que nos es relatado y la no excesiva duración de los capítulos (45 minutos), contribuyen a la amenidad y una gran adicción.

   Interpretación: Pues en este caso le ha tocado a Jessica Biel, que, dicho sea de paso, llevaba tiempo desaparecida y ya llevaba otro tanto en franca caída tras no confirmarse las expectativas que tenia como actriz. Es por ello, que, en su caso, este papel le ha dado la oportunidad de la resurrección hasta el punto de reconocer que nunca la había visto tan comprometida. Posiblemente sea la mejor interpretación de su carrera. Biel se come literalmente cada plano en el que aparece. Algo parecido, aunque a otro nivel, ocurre con Bill Pullman, quien también nos ofrece una de sus mejores caras. La química entre ambos personajes/actores, entre policía y asesina, es la que mantiene a flote verdaderamente la historia.

   Escena (spoiler): Es imposible pasar por alto el momento más impactante de la serie cuando Cora(Biel), sin venir a cuento, la emprende a puñaladas con un chico en la playa de un lago. Son bastante reveladores los flashbacks de su infancia cuando comprendemos la carga culpabilizadora de su madre con relación a la enfermedad de su hermana. Y más tarde el chantaje emocional al que es sometida por ésta. Todo el misterio gira en torno a lo ocurrido una determinada noche y la reconstrucción del hecho, que finalmente conocemos, es impactante. Podría serlo más, pero está correcto. Me ha parecido emotiva la despedida de Cora del policía (Pullman), dándose cuenta de que es el único amigo que ha tenido y que le debe la vida.

   LO PEOR: Precisamente ese elevamiento brutal de nivel es el que va a hacer a esta serie sucumbir ante colosos como “Big Little lies” y “El cuento de la criada”, quedándose a su lado como un mero producto de segunda fila, cuando hace unos años habría sido uno de primera. Buena culpa de ello es no poseer un clímax a la altura de la historia.

   CITAS: “Soy un buen estudiante de medicina buscando sus huevos en el fondo de una botella”. “Esa mujer es como una araña en su cerebro... y lo peor es que usted lo alimenta”. “Hay una damisela que se está ahogando en autocontrol”. “Lleva una pistola a una pelea de cuchillos”. “Crecí con Dios en mi casa... y todo lo que trajo fue más dolor”. “Si te hubiera dicho el pedazo de mierda que era, nunca me hubieras querido”. “Usted creyó que la situación estaba bajo control... ¿pero qué parte de ser apuñalado siete veces está bajo control?”. “Tenemos todos los detalles, a excepción del porqué”.

   REFERENCIAS: La estructura de flashbacks para reconstruir el suceso que da lugar a todo puede recordar a “Big Little lies” pero es que más allá de eso, no tiene nada que ver. Se basa en la novela homónima de Petra Hammesforh, que también participa en el guión.

   CONCLUSIÓN: 7’5. Un rompecabezas que mantiene la intriga hasta prácticamente el final, con una Jessica Biel más inspirada que nunca.