Concluye este mes la saga de “Los juegos del hambre” con el estreno de “Sinsajo, parte 2”, quedándose finalmente en cuatro entregas. El subgénero de películas distópicas siempre ha gozado de buena salud, pero fue este film el que propició la moda de esta temática destinada principalmente a un público joven. Buena prueba de ello son ejemplos tan actuales como “El corredor del laberinto” o la saga “Divergente”, del mismo corte.
Viene precedida por la trilogía de novelas escritas por Suzanne Collins y su aplastante éxito a nivel mundial. Literatura muy orientada al público joven, muy en auge tras series como “Harry Potter” o “Crepúsculo”. Sin embargo, su adaptación dio varias vueltas , habida cuenta de la envergadura presupuestaria que exigía llevar el proyecto a la pantalla.
No por ser una historia destinada al público adolescente, sus temas a tratar resultan menos trascendentes. Así nos encontramos con la recreación de una sociedad en la que prima el sistema de clases. Se abordan conceptos como el hambre (al que alude el título), la pobreza, la violencia y la cultura televisiva de Gran Hermano (las matanzas de los juegos son televisadas) muy al estilo de “El show de Truman”.
Tras una especie de guerra civil ocurrida tiempo atras, cada año se celebran unos juegos llamados “del hambre” para recordar a todo los habitantes que rodean el Capitolio el lugar que ocupan en la sociedad. Cada distrito, y son doce, debe enviar un chico y una chica para luchar a muerte hasta solo quedar uno.
El reparto es de auténticas campanillas. Además de Jennifer Lawrence, cuenta con Josh Hutcherson, Elisabeth Banks, Woody harrelson, Donald Shutterland (como villano), Stanley Tucci, Wes Bentley, Liam Hemsworth, y los que se han ido incorporando en las sucesivas secuelas, como el fallecido Philip Seymour Hoffman y Julianne Moore. De todos modos, supuso la consagración de Lawrence como estrella.
Fue un éxito rotundo de taquilla. Se invirtieron uno 200 millones en su producción y no sólo los recupero rápidamente, sino que su recaudación mundial ascendió a 690 millones de dólares. Si contabilizamos lo que lleva acumulado la saga con sus secuelas, exceptuando “Sinsajo, parte 2”, lleva la friolera de 1900 millones de dólares acumulados. Es decir, la rentabilidad de la próxima entrega está asegurada.
Los seguidores de los libros, en general, consideran que la adaptación es bastante fiel al texto original. En cuanto a las ssiguuientes partes, “En llamas” tiene un esquema similar a ésta. Y es que con “Sinsajo” cambian los derroteros y se advierte una evolución más profunda, con toda seguridad la franquicia cerrará adecuadamente la historia.
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