Si desde “Rocky” habían pasado tres años para una
secuela, otros tres pasarían para hacer
otra nueva, ya que Stallone no estaba dispuesto a dejar pasar la oportunidad de
explotar un filón que parecía inagotable. Así que, de nuevo escribió el guión,
dirigió y protagonizó la película, algo que empezó ya a acostumbrarse a hacer.
Por fuerza, el personaje debía pasar a otra fase. Rocky ya es un consumado campeón, que ha defendido el titulo más de diez veces. Su valía está más que probada. Su situación había cambiado. Ya adaptado a la fama e instalado en la comodidad económica, su desmotivación deportiva era tan pronunciada que se plantea seriamente la retirada.
Stallone muestra a
Rocky como si necesitara una cura de humildad, la cual llega en forma de bestia
parda llamada Clubber Lang, interpretado por Mr T. (alias M.A. Barracus) que se
muestra casi tan simpático como en la célebre serie “El equipo A”. Curiosamente
otro rival de raza negra se colocaba como rival de Rocky. ¿Coincidencia?
Seamos claros, este Rocky ya no encandilaba tanto, no en
vano Stallone a falta de algo mejor,
metió dos combates en la historia, claro
síntoma de no tener nada mejor que
contar. El personaje había perdido lo que había conquistado al público,
ya no era el pequeño, ya no era David, era Goliat.
Pero el tirón de
Rocky era tal y sus fans tan incondicionales que volvió a ser un éxito de
taquilla, de hecho el más rotundo hasta esa fecha. Si bien la inversión fue
superior (de 7 de "Rocky II" a 17 millones en ésta), la mayor parte de ellos se invirtieron en la promoción de la película,
lo cual reportó 270 millones en las salas de cine. Osea, inapelable.
Como curiosidad, se realizó una estatua de bronce de Rocky
(como ya apuntaba el argumento de Rocky II) en las escaleras del Museo de Arte
de Filadelfia, escenario hiper famoso del entrenamiento de Rocky de la primera
película. Este hecho suscitó numerosas críticas aduciendo que era publicidad
para la película. Acabó retirándose. Pero volvió allí en 2006 en el 30
aniversario del inicio de la saga
Por cierto, se
intentó hacerse con los derechos de una canción de Queen para la película.
Finalmente no se consiguió y se encargó una canción al grupo Survivor, que
compuso e interpretó la posteriormente muy conocida “Eye of the tiger”, que fue
nominada en los oscars.
Hulk Hogan hace un cameo en el film como parte de un combate de exhibición.
Hulk Hogan hace un cameo en el film como parte de un combate de exhibición.
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