Cuando vi esta película pensé: "ya era hora de que hicieran una película de carreras en condiciones". Basada en hechos reales, se narra la rivalidad que mantuvieron los pilotos de Fórmula 1, James Hunt y Nikki Lauda. Es de esos filmes que te deja un buen sabor de boca, tanto por lo que ves como por lo que se cuenta, que tampoco tiene porque ser exactamente lo mismo.
Ron Howard me parece un director de sobrada calidad, pero siempre lo he considerado un buen artesano más que un maestro. No voy a decir que esta película sea una obra maestra pero si me parece una de las mejores tratadas del género de deportes. No sé si será que mi apasionamiento por el mundo del motor anula mi objetividad, que todo puede ser, pero por ello argumentaré mi opinión.
El film auna buenos diálogos con imágenes que satisfacen el ansia visual de los aficionados a la Fórmula 1. Pero vamos, que la historia se sostiene tan sólidamente que no hace falta ser ningún entendido en la materia. Es una visión madura y equilibrada del mundo de la competitividad, de la presión, de la adrenalina y de la pasión.
La elección de los actores fue un acierto total de casting. Aunque en un principio no me terminaba de convencer, Daniel Bruhl encarna excepcionalmente el carácter controvertido de Nikki Lauda. Lo mismo que Chris Hemsworth como James Hunt, que incluso tiene un enorme parecido físico con el ya fallecido piloto. Además, tenemos la participación de las bellas Natalie Dormer, Olivia Wilde y Alexandra María Lara, como las distintas parejas de los protagonistas.
Uno de los puntos destacados del film es la recreación de los grandes premios. Es de un realismo considerablemente logrado. Ya no solo lo que son las carreras en si, sino todo lo que las rodea; la ambientación, las narraciones de la prensa, la afición, los boxes, todo.
Recomiendo interesarse en la historia que relata la película. No es necesario ser un aficionado a las carreras, ni si quiera al deporte. La película narra como la rivalidad no está reñida con la admiración, y si puede ejercer como vehículo motivador para la más exigente superación personal, que de otra forma quizá no se diera, y que puede aplicarse a cualquier ámbito de la vida.
Supera a todas esas pelis basadas en deportes del motor, particularmente de coches como "Días de trueno"(Nascar) o "Driven"(IndiCar). No dejaría pasar la oportunidad de visionar, si es que aún no se ha hecho, el documental del dios de la Fórmula 1, "Senna", comentada en el blog. (http://clubcinefilos.blogspot.com.es/2014/04/senna.html).
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