FICHA
TÉCNICA
domingo, 30 de abril de 2023
Los Tres Mosqueteros: D'Artagnan
Título:
Los
tres mosqueteros: d’Artagnan.
CRÍTICA
SINOPSIS: D’Artagnan
llega a París para convertirse en mosquetero, su gran sueño. Por
azares del destino se reta en duelo con tres de los más importantes
del reino. Su relación con ellos le llevará hasta una conspiración
contra el rey.
LO MEJOR: Igual
la de Alejandro Dumas es la novela literaria más adaptada de la
historia del cine. Si no lo es, debe estar en los primeros puestos.
Pues quién lo iba a decir pero acaban de hacer, a falta de
confirmación, la que probablemente es la mejor versión. Y falta
confirmar porque esto es solo la primera mitad, habrá que esperar a
ver la segunda pero de momento pinta muy bien. Porque lo visto hasta
ahora es la adaptación más seria, más espectacular y más violenta
(sí, a la gente cuando se la pincha con una espada sale un líquido
rojo que se llama sangre). También es la más apegada, que no
estrictamente fiel, al texto original. Por lo que el espectador
tendrá oportunidad de ver pasajes que no se han visto en otras
versiones. Lo que ayuda a desarrollar más y mejor las intrigas
palaciegas (casi a lo “Juego de tronos”), pero sin olvidarse de
las escenas de acción, que son realmente brutales, algunas rodadas
en excelentes planos secuencia, con abundante cámara al hombro, en
un estilo puramente moderno. En conjunto da como resultado un ritmo
vibrante que hace que la narración sea tremendamente entretenida.
Todo lo que tiene alrededor contribuye a mejorar el espectáculo, que
en ocasiones llega a ser épico, como la magnífica ambientación, la
fotografía, vestuario y una poderosa banda sonora. Estoy deseando
ver la segunda parte.
Interpretación: Es
curioso pero en todas las versiones anteriores, el personaje que
precisamente me interesa menos es D’artagnan, creo que siempre bajo
la sombra de los tres mosqueteros. Pues aquí no, y en gran parte es
gracias al convincente trabajo de Francois Civil. Pero igualmente
está muy bien arropado por los que interpretan a esos mosqueteros,
sin duda, un acierto en el casting, como son Romain Duris, Pio
Marmai, y desde luego, Vincent Cassell. Por otro lado, no se me
ocurre mejor Milady que Eva Green, aunque está claramente reservada
para la segunda parte, al igual que el Richelieu de Erik Muf. El que
me falta es Roquefort.
Escena (SPOILERS!!): Nada
más empezar uno se da cuenta en el asalto del principio, en
oscuridad, bajo la lluvia y con una escena de acción en plano secuencia, que el tono de la película es otra cosa. Como cuando
encuentran a la chica asesinada en la cama de Athos, ensangrentada,
desnuda (cuando se ha visto un desnudo en las otras versiones) y con
las puñaladas perfectamente visibles. Pero lo que más me ha
sorprendido son precisamente las escenas de acción, rodadas con un
pulso de cámara de cine actual, como en el combate tras los “duelos”
con los mosqueteros o en la trampa en la visita del Duque de
Buckingham (madre mía como suenan los disparos). Bastante
sorprendente es el atentado terrorista en la boda del hermano del
rey, que termina en masacre (muy “Juego de tronos” también).
LO PEOR: Que
no estrenen la segunda parte ya y tengamos que esperar todavía unos
cuantos meses. Pero bueno, casi por decir algo, la narración hay un
momento que parece un tanto atropellada, para pasar del segundo al
tercer acto, pero es un efecto que se disipa rápidamente.
REFERENCIAS: Hay
innumerables versiones anteriores que no voy a mencionar. Esta se ha
dividido en dos partes. La primera más centrada en D’artagnan . Y
la segunda, que llegará a finales de año, en Milady.
sábado, 29 de abril de 2023
Almas en pena de Inisherin
FICHA
TÉCNICA
Título:
Almas
en pena de Inisherin.
Dirección:
Martin
McDonagh.
País:
Reino
Unido.
Año:
2022.
Duración:
114
min.
Género:
Drama.
Interpretación:
Colin
Farrell, Brendan Gleeson, Kerry Condon, Barry Keoghan, Pat Shortt,
David Pearse, Gary Lydon, Jon Kenny.
Guion:
Martin
McDonagh.
Producción:
Graham
Broadbent, Peter Czernin.
Música:
Carter
Burwell.
Fotografía:
Ben
Davis.
Distribuidora:
Walt
Disney Pictures.
CRÍTICA
SINOPSIS:
En
una remota isla de Irlanda, dos de sus habitantes, hasta el momento
amigos, rompen su amistad por decisión de uno de ellos ante la
incomprensión del otro, lo cual no acepta. Por lo que la tensión
irá en aumento hasta tener consecuencias dramáticas.
LO
MEJOR: Cinco
años han pasado desde su anterior trabajo, “Tres anuncios a las afueras”,
que también fue en su momento una de las favoritas a los Oscars pero
con un resultado decepcionante (e injusto) como lo ha sido esta. No
obstante, es habitual espaciar el tiempo entre sus películas para
Martin McDonagh, uno de esos cineastas peculiares, nada comerciales y
muy personales. Sobre todo en el rasgo más predominante en su cine,
un humor negro muy especial. Sus películas son muy divertidas aunque
en el fondo traten de un drama o incluso una tragedia. De tal manera
que el espectador tiene una sensación confusa, lo de estar riendo de
algo que no debería producirle gracia. Y con eso juega McDonagh
aquí. Es importante, por tanto, señalar que no hay que tomar la
historia de forma literal pues está haciendo una parábola de la
guerra civil. Algo a tener en cuenta a la hora de interpretar ciertas
situaciones que plantea el guion, quizá ciertamente ridículas si lo
hacemos de forma literal. La propia narración se asemeja a la de un
cuento, a una fábula en la que se hacen constantes referencias a una
guerra que nunca vemos, porque la que se está librando es la de los
personajes. Bajo un entorno tan cerrado como puede ser el de una isla
(donde se refleja bastante el comportamiento isleño de sus
habitantes) pero al mismo tiempo mostrado mayoritariamente en
exteriores, de lo cual saca gran rendimiento la fotografía.
Interpretación:
El
reparto está de matrícula, todos ellos. Con un protagonismo
dividido, en mayor o menor medida, en cuatro partes. Colin Farrell
viene ya bastante tiempo haciendo esto. Un actor con su sanbenito
que ya resulta absurdo. Pero ya debería estar de sobra superado
porque los personajes que viene interpretando son de todo menos
fáciles. Y esta es la mejor interpretación de su carrera. Pero es
que las otras tres partes están magníficas. Tanto Brendan Glesson,
como Barry Keoghan, como, y sobre todo, una soberbia Kerry Condon.
Escenas
(SPOILERS!!): Cada
acto de la película tiene un significado metafórico. El hecho de
que el personaje Glesson decida romper la amistad con el de Farrell
es como cuando un país se divide en dos a causa de una disputa. O
como una parte de la población decide independizarse y la otra ni lo
entiende ni lo acepta. El corte de los dedos puede interpretarse como
manifestaciones, como protesta o incluso como actos terroristas.
Actos que tienen consecuencias, como la muerte del burro (escena
tristísima, por cierto), lo que provocó una reacción violenta,
aunque inicialmente no se tenga intención de ello. Curiosamente, los
que se van de la isla, los exiliados, aunque vayan a donde está la
verdadera guerra, son los que se salvan, como el personaje de Kerry
Condon. Sin embargo, el de Barry Keoghan representa las víctimas del
conflicto.
LO
PEOR: No
es para todo el mundo y exige al espectador paciencia y tratar de ver
más allá de lo evidente. Porque si cometes el error de tomarlo todo
literal, si no entras en las metáforas, no solo no vas a pillar nada, es
que además te vas a salir de la historia con facilidad. No es un
humor fácil el que plantea Martin McDonagh.
REFERENCIAS:
La
película tuvo nueve nominaciones a los Oscars, de los cuales no ganó
ninguno. Como referencia principal está el propio cine de Martin
McDonagh. Pero en ciertos puntos tiene aspectos que recuerdan a “Los
Santos Inocentes”.
CONCLUSIÓN: 7. Otra película con el sello peculiar de su creador, Martin Mcdonagh, con ese extraño sentido del humor, esta vez para hacer una parábola de la guerra, de la cual participa un magnífico e inspirado reparto.
martes, 25 de abril de 2023
Escenas Míticas: Diablo - Pactar con el diablo
Si algo tienen en común los títulos elegidos para figurar en este ciclo sobre el diablo, no sobre las posesiones o exorcismos, sino sobre el diablo como personaje en sí mismo, como elemento central de la trama, de una forma u otra; es que al final gana. Tanto en “La semilla del diablo”, como en “La profecía” o “El corazón del ángel”, Satanás termina saliéndose con la suya. Además, hay dos subtramas que se repiten en todas ellas: el pacto con el diablo y la llegada del Anticristo.
Pues aquí son ambas. Vinculando el argumento al mundo de la justicia, al derecho penal y, por tanto, a los abogados, como excelente caldo de cultivo para plantear dilemas morales y así colocar una balanza entre la ambición por el éxito, el deseo de ganar del letrado, y lo puramente ético. Esa es la prueba a la que somete el diablo al protagonista tentándole a conseguir el triunfo a cambio de que engendre al Anticristo.
No obstante, la película tiene bastante más referentes, en este caso, literarios. De primeras está basada en la novela homónima de Andrew Neiderman. Pero temáticamente es mucho más clásica. El propio nombre del antagonista alude al escritor del poema “El paraíso perdido”, John Milton, el cual describe su particular visión de la caída de los ángeles rebeldes. Incluso se llega a mencionar la frase del poeta inglés: “Es mejor reinar el infierno que servir en el cielo”.
También hay referencias bíblicas. Se llega a emparentar la ciudad de Nueva York con la antigua Babilonia. Ciudad, por cierto, que en un momento dado muestran completamente vacía. Curiosamente, ese mismo año, 1997, hacia lo propio Alejandro Amenábar con Madrid en su “Abre los ojos”. No queda ahí la cosa, pues también juega con los colores.
Previo al asesinato de uno de los personajes, este es “perseguido” por varias personas vestidas con los colores que representan a los Cuatro Jinetes del Apocalipsis, correspondientes a la Conquista, la Guerra, la Hambruna y la Muerte. Además, el protagonista comienza la película usando trajes de colores claros, que a medida que avanza la trama van oscureciendo hasta terminar con un traje completamente negro.
Papel para el que en un principio se pensó en Brad Pitt y llegaron a estar considerados Christian Slater, John Cusack y Edward Norton. Finalmente se quedó con él Keanu Reeves, que venía de triunfar con “Speed” y que renunció a protagonizar la secuela para aceptar este papel. El de John Milton fue rechazado por Al Pacino hasta cinco veces, tomando a Robert Redford y a Sean Connery como alternativas recomendadas por él mismo.
Varios cambios en el guion animaron a Pacino a aceptar. Personalmente creo que es uno de los personajes de la amplia carrera del actor italoamericano con las que mejor se lo ha pasado y considero que es una de las mejores encarnaciones del diablo que se han hecho. Completa en el reparto Charlize Theron, que estuvo varias meses hablando con un psicoterapeuta una hora al día para prepararse para interpretar la esquizofrenia, y Connie Nielsen, bilingüe, al igual que su personaje.
Aunque en un principio se pensó en Joel Schumacher para dirigir, finalmente se eligió a Taylor Hackford, cuyos títulos más destacados de su filmografía son “Oficial y caballero”, “Noches de sol”, “Eclipse total” o “Ray”, además de la que estamos comentando. Que tuvo mayoritariamente buenas críticas y económicamente no fue mal. Costó 50 millones de dólares y recaudó 153 en taquilla.
Como curiosidad, se tomó como inspiración principal para el caso que debe llevar el personaje de Reeves, Kevin Lomax, que es un triple asesinato, el caso real y tremendamente publicitado por los medios en Estados Unidos de O.J. Simpson.
domingo, 23 de abril de 2023
Air
FICHA
TÉCNICA
Título:
AIR.
Dirección:
Ben
Affleck.
País:
Estados
Unidos
Año:
2023.
Duración:
112
min.
Género:
Drama,
biográfico,
deporte.
Interpretación:
Matt
Damon, Ben Affleck, Viola Davis, Jason Bateman, Chris Messina, Chris
Tucker, Matthew Maher, Marlon Wayans, Gustaf Skarsgård, Julius
Tennon, Jessica Green, Joel Gretsch, Barbara Sukowa, Tom Papa,
Gabrielle Bourne, Lechristopher Williams, Dan Bucatinsky, Haylee
Baldwin, Andy Hirsch, Tami Jordan, Zacorri, Ure Egbuho, Martina De
Leon.
Guion:
Alex
Convery. Biografía sobre: Michael Jordan.
Fotografía:
Robert
Richardson.
Distribuidora:
Warner
Bros. Pictures.
CRÍTICA
SINOPSIS: En
los años ochenta, la marca Nike se propuso dar un gran golpe de
afecto al mercado de zapatillas de baloncesto para adelantar a sus dos
grandes competidoras, Adidas y Converse. Para ello lo apostaron todo
por un joven jugador universitario, Michael Jordan.
LO MEJOR: Es
de esas películas sobre el deporte pero no de deporte. Es decir, no
vamos a ver baloncesto más allá de un par de vídeos de ojeadores.
Es más, la película es tanto sobre Michael Jordan como sobre Nike,
y casi más decantándose hacia lo segundo. Pero si va sobre el
deporte, pues habla de un acuerdo histórico, uno que sentó tal
precedente que a partir de ahí cambiaron las reglas de los contratos
de patrocinios de jugadores, y que potenció a la marca Nike, al
baloncesto americano y al propio deporte como no había ocurrido
hasta el momento. Pocas veces, o ninguna más, se ha visto una
empresa tan vinculada popularmente a un deportista. Y la película
nos habla de como se fraguó esta situación, con bastante fidelidad
a los hechos, por lo visto, y todo lujo de detalles que hará las
delicias de los interesados en esta historia. Que narra la perfección
un Ben Affleck volviendo a confirmarse como un excelente director,
de mirada clásica, por cierto, sin florituras de cámara. De hecho,
la trama está conformada por constantes conversaciones, mayormente
trata sobre gente hablando, y aún así es muy entretenida, tiene un
muy buen ritmo, gracias a unos diálogos rápidos y vibrantes, en
ocasiones escupidos como si salieran de una ametralladora o de las
plumas de Aaron Sorkin y David Mamet. Si no estuviera tan lejos de la
próxima edición, la consideraría una de las serias aspirantes a
los Oscars.
Interpretación: El
mejor fichaje de la película es el propio reparto. Muy pocas veces
Matt Damon ha estado tan bien y eso es decir mucho. En un rol más
secundario, lo cual le beneficia, y casi a ese nivel, el propio Ben
Affleck. Lo mismo que las excelentes aportaciones de Jason Bateman o
Chris Messina. Aunque la auténtica estrella es una Viola Davis que
fue petición expresa de Michael Jordan, el cual no solo no sale sino
que además, el actor que le interpreta, no muestra el rostro en
ningún momento. Chris Tucker y Damon Wayans completan en el reparto.
Escena (SPOILERS!!): Evidentemente,
los mejores momentos corresponden a conversaciones. De como van a
diseñar las zapatillas, qué estrategia utilizar para convencer al
jugador. Como cuando el personaje de Damon se presenta en la casa de
los Jordan y habla con la madre. Desde luego como la reunión con
Michael y sus padres en la sede de Nike. Es particularmente graciosa,
porque la película tiene muchos toques de humor, la bronca entre
Sony Vaccaro (Damon) con David Folk (Messina), el representante de
Michael Jordan, por teléfono y con el segundo totalmente fuera de
sí. Interesante cuando nos muestran imágenes del futuro de Jordan
cuando aún quedan años para que ocurra respecto a la trama de la
película.
LO PEOR: No
deja de ser un anuncio de dos horas de Nike, incluso salpicando la
narración con los lemas de inspiración de la empresa. Mostrando el
esfuerzo de la marca en convertirse en lo que es hoy. Y funciona
porque es salir de la sala y ponerte a mirar zapatillas deportivas de
Nike. Claro que ves los precios y se te pasa.
REFERENCIAS: Juega
en la misma liga de películas sobre deporte pero no deportivas, como
“Jerry Maguire”, “Moneyball” o “Decisión final”. Uno de
los episodios de la serie documental “El último baile” trata el
tema de la película.
CONCLUSIÓN: 7’5. Sobre el deporte pero no de deportes, Affleck vuelve a mostrar su talento narrativo para contarnos uno de los acuerdos comerciales más importantes de la historia del deporte, y de paso, vende zapatillas.
sábado, 22 de abril de 2023
Microcríticas Express: Yellowstone/Tulsa King
Lo
digo así de claro, me parece una de las mejores series que hay en la
actualidad. Mucho más popular en Estados unidos, donde si tiene un
seguimiento y un éxito acorde a sus méritos. También es verdad que
hasta hace muy poco no habían llegado a España sus últimas
temporadas, que son ya cinco, hasta que lo han hecho por medio de la
plataforma SkyShowtime. Viene
a ser el “Dallas” o el “Falcon Crest” de nuestros tiempos
pero tranquilos que no es un culebrón, por mucho que comparta con
ellas algunas similitudes argumentales. Creada por uno de los mejores
guionistas actuales, Taylor Sheridan, el que probablemente sea el
máximo representante del neowestern, lo que se respira prácticamente
en todos los episodios, con continuas referencias a un modo de vida
del que claramente está enamorado, el de los ranchos ganaderos. No
faltarán elaboradas escenas de doma de caballos, de rodeos,
traslados de reses, . . . Todo bajo una fotografía de una belleza
espectacular. Liderada por un Kevin Costner a sus anchas, que se nota
que está en su salsa y que demuestra el actorazo que es. Pero
perfectamente respaldado por un reparto de nombres que no tuvieron
demasiada suerte en el cine pero que en esta serie se lucen pero
bien, como son los casos de Kelly Reilly (absolutamente magnífica),
Cole
Hauser (y eso que me parecía malo) o Wes Bentley (“American
beauty”). Y hay más, porque incluso los personajes secundarios son
tremendamente carismáticos. Hasta el propio Sheridan tiene un
pequeño papel. Me he tragado las tres temporadas que me faltaban
seguidas porque es muy adictiva. El que no la haya visto ya, no sabe
lo que se pierde. 8.
Otra
serie creada por Taylor Sheridan, que además de ser un gran
guionista de cine (“Sicario”) e incluso haber dirigido y bastante
bien (“Wind River”), ha encontrado en la televisión un medio
perfecto para desarrollar sus ideas. Aquí no tan marcado por el
western, aunque la cabra tira al monte y desde luego que tiene sus
toques. De todos modos, no ha tenido tanta implicación Sheridan en
esta serie como si la tiene en “Yellowstone”, donde escribe todos
los episodios él mismo. Más
en el campo de las historias de mafiosos, con un antiguo capo que sale
de la cárcel y prácticamente es desterrado a una ciudad perdida
como Tulsa, donde debe empezar de cero. Interpretado por un Sylvester
Stallone que se apropia de la pantalla desde el primer minuto y que
se le ve pasárselo bien en un rol muy distinto al que se le ha visto
durante el resto de su filmografía. Aunque siempre me ha parecido
mejor actor que su gran rival como héroe de acción, Arnold
Schwarzenegger. Ojo, no comparo sus películas, sino su talento como
actores aparte de ser estrellas del género. Creo que Stallone se ha
sabido reinventar y esta serie es el mejor ejemplo de ello. Tampoco
voy a decir que la serie sea una maravilla, sin él no valdría ni la
mitad, pero si resulta muy divertida y los episodios se pasan
volando. Porque además tiene un punto de humor que le viene de
maravilla. 6’5.
martes, 18 de abril de 2023
Trailerfilos: El último viaje del Demeter (tráiler oficial)
Basada en un fragmento de la obra de Bram Stoker, concretamente el capítulo que describía, mediante el diario del capitán del barco donde viajaba "Drácula", el Demeter, a Londres, todas las vicisitudes del trayecto. Parece que veremos una imagen más monstruosa del conde, cercana a la de Nosferatu. Dirige André Ovredal ("La autopsia de Jane Doe") y en el reparto podemos encontrar al veterano Liam Cunningham. Se estrena el 11 de agosto en Estados Unidos, aún no está confirmada la fecha en España.
Escenas Míticas: Diablo - El corazón del ángel
Podría considerarse como un adelanto de lo que hoy llamamos terror elevado. Es decir, un terror más complejo, de mayor carga dramática y sin los mecanismos comerciales habituales. De hecho, su mezcla con otros géneros como el noir, y abordar temas como el vudú, la brujería y los pactos con el diablo, pero desde un plano más policíaco y de intriga, la alejan del terror puro.
Es más, la trama del pacto con el diablo prácticamente se descubren en su última escena, hasta el momento se la podría considerar más un thriller psicológico de asesinatos. Estaba redefiniendo sin saberlo muchas claves del género que influirían más tarde en otros autores y obras, una de las más claras es “Seven” de David Fincher, si atendemos a su ambientación, fotografía y, sobre todo, a su final sorpresa.
Sin embargo, en su momento no fue muy bien comprendida por la crítica (las tuvo tanto positivas como) o el público (sólo recaudó 17 millones de dólares en taquilla habiendo invertido 18 en la película). No obstante, posteriormente fue adquiriendo un estatus de obra de culto y con el tiempo ha tenido un reconocimiento más acorde a su calidad.
Basada en la novela de William Hjortsberg, “Ángel caído”, en la cual estuvo muy interesado durante un tiempo Robert Redford, finalmente fue a parar a Alan Parker, perteneciente a una generación de cineastas británicos provenientes del mundo de la publicidad (lo cual es notable en la película) junto a otros como Ridley y Tony Scott o Adrian Lyne, que además de dirigir, escribió el guion.
A Alan Parker le debemos grandes títulos como “El expreso de medianoche”, “Fama”, “Birdy” y “Arde Mississippi “. Y, por supuesto, la que nos ocupa ahora. A la cual salpicó de incontables pistas, indicios, símbolos y tratamientos visuales que poniendo mucha atención nos podían orientar sobre el giro al final fantástico. Pistas mucho más reconocibles a posteriori que hacen que la película merezca un segundo visionado.
Por ejemplo, durante la narración vemos una gran cantidad de ventiladores, que prácticamente ejercen de anunciadores de la muerte, pues suelen preceder a un asesinato. También son habituales los ascensores, el más evidente es el de las escenas de los créditos. Algo muy novedoso para la época. Aún no había llegado Marvel a poner de moda las escenas post créditos pero Parker ya introdujo una escena que se desarrollaba de forma intermitente entre los créditos finales de la película mientras veíamos al protagonista bajar de forma interminable en un ascensor, simbolizando su descenso al infierno.
Hay otros más evidentes, como los símbolos que llevan varios personajes. Concretamente, un pentáculo invertido, en el collar del personaje de Charlotte Rampling y en el anillo de Robert de Niro, que indicaban su relación con el diablo. O la escena en la que el segundo se come un huevo duro, simbolizando como devora el alma del protagonista, qué curiosamente se echa sal por encima, gesto supersticioso para cegar al diablo.
Además, los nombres de los personajes son muy clarificadores. Johnny Favorite, Harry Angel, Epiphany (epifanía-revelación) o Louis Cyphere (se pronuncia como Lui-Saifer - Lu-Cifer). Otros detalles más visuales, como la controvertida escena de sexo, donde el director decidió cambiar el agua de las goteras de la habitación por una lluvia de sangre de la que no avisó a los actores. Una escena que tuvo que ser severamente recortada por ser inicialmente calificada como X.
Lo que le supuso el despido a Lisa Bonet de la serie en la que participaba, una de las sitcom más populares del momento, “La hora de Bill Cosby”, que prescindió de ella por mostrar una imagen tan sexualizada en la película, con varis desnudos y escenas mostrando claras transparencias en su vestuario, incluso mojado en ocasiones.
Sin embargo, a Lisa Bonet le supuso una nominación a los Saturn (Premios a la Ciencia-ficción, Fantasía y Terror), al igual que a Robert de Niro y el guion de Alan Parker. Un De Niro que también aportó ideas a la historia, como el progresivo crecimiento de sus uñas, la elección del bastón que lleva o el desmelenamiento final (literal e interpretativo), e incluso la decisión de usar las lentillas amarillas.
De Niro había sido considerado inicialmente para el papel protagonista, junto a otras opciones como Dustin Hoffman o Jack Nicholson, pero él estaba más interesado en el del villano, que llegó a ser ofrecido a Marlon Brando. Finalmente fue para él, al igual que el del protagonista para Mickey Rourke, de moda tras sus papeles en "Manhattan Sur" y, sobre todo, "Nueve semanas y media".
lunes, 17 de abril de 2023
Trailerfilos: True Detective T4 (tráiler oficial)
Si ponen en la misma frase "True Detective" y Jodie Foster, a mí no hay que decirme mucho más, ya me tienen. Parece que Clarise sigue escuchando ciertos gritos porque nuevamente se pondrá a resolver un crimen. Pero tranquilos, no tiene nada que ver con "El silencio de los corderos", solo con el entusiasmo que le produce a un servidor ver a Foster en un thriller policíaco y más en esta serie. aunque lo hará bajo otro creador, concretamente Barry Jenkins en lugar de Nic Pizzolatto. La historia se situará en Alaska y el caso estará en torno a la misteriosa desaparición de unos hombres. Se titulará "Night country". Se desconoce cuantos episodios tendrá y cuando se estrenará pero se cree que en la segunda mitad del año. Así que, a esperar.
domingo, 16 de abril de 2023
Babylon
FICHA
TÉCNICA
Título:
Babylon.
Dirección:
Damien
Chazelle.
País:
Estados
Unidos.
Año:
2022.
Duración:
189
min.
Género:
Drama,
comedia.
Interpretación:
Margot
Robbie, Brad Pitt, Diego Calva, Jean Smart, Li Jun Li, Jovan Adepo,
Tobey Maguire, Max Minghella, Katherine Waterston, Samara Weaving,
Eric Roberts, Lukas Haas, P.J. Byrne, Jeff Garlin, Rory Scovel, Damon
Gupton, Spike Jonze, Olivia Wilde, Phoebe Tonkin, Ethan Suplee,
Jennifer Grant, Chloe Fineman, Olivia Hamilton, Patrick Fugit, Kaia
Gerber, Flea.
Guion:
Damien
Chazelle.
Producción:
Marc
E. Platt, Matthew Plouffe, Olivia Hamilton.
Música:
Justin
Hurwitz.
Fotografía:
Linus
Sandgren.
Distribuidora:
Paramount
Pictures.
CRÍTICA
SINOPSIS:
En
los años veinte, una serie de actores emergieron como estrellas del
cine mudo, lo que les catapultó casi como dioses. Pero el cambio al
cine sonoro provocó su caída y su olvido.
LO
MEJOR: Va
a pasar a la historia como uno de los grandes fracasos del cine, pues
costando con 80 millones de dólares, apenas ha recuperado la mitad de lo
invertido. A pesar de contar con buenas críticas profesionales y
tener una buena nota media en páginas de cine votadas por el
público. Eso sí, ha sido ignorada en las categorías más
importantes de los Oscars de este año. Y lo cierto es que la
película es bastante buena. Un proyecto en el que Damien Chazelle ha
gozado de plena libertad, si no, no se explicaría como es una de las
superproducciones más excesivas, pues llega a ser incluso grotesca,
que he visto en mucho tiempo, que homenajea la edad dorada de
Hollywood pero a la vez elabora un despiadado retrato de lo que
supuso el paso del cine mudo al sonoro, lo que supuso a su vez la caída de
las estrellas que habían brillado en la época precedente, a través
de la historia coral con varios personajes que representan las
distintas fases y formas de la decadencia, mandando un mensaje sobre
un Hollywood que ensalza a sus estrellas a la misma velocidad que las
destruye. De ahí un título que emparenta la historia con la caída
de Babilonia y que paradójicamente tiene cierto paralelismo con lo
que ha ocurrido a la propia película, a la cual no ha salvado ni el
talento ni el virtuosismo de Chazelle tras la cámara.
Interpretación:
Me
da rabia que las dos últimas películas de Margot Robbie,
“Amsterdam” y esta, apuntaban a grandes eventos cinematográficos
y se hayan convertido en sendos fracasos de taquilla. Cuidado con un
tercero porque su carrera podría correr peligro. Y ella no lo merece
porque aquí está absolutamente desatada y su interpretación sola
en sí misma ya es un espectáculo total. Brad Pitt está en su línea
sobrado para llenar la pantalla con su sola presencia. Aunque
realmente sea incluso más protagonista, sorpresivamente, Diego
Calvo. En el reparto hay muchas caras, como Tobey Maguire, Samara
Weaving, Olivia Wilde.
Escenas
(SPOILERS!!): Sólo el larguísimo prólogo de media hora es una película en sí misma. Una
macrofiesta plagada de excesos, alcohol, drogas y sexo, retratando el
desfase de unas estrellas de cine que no tenían limitaciones. Una
enorme bacanal apabullante y arrolladora, donde Chazelle exhibe su
habilidad para mover la cámara entre los personajes. Luego hay
secuencias como la del cine riéndose de la película de Brad Pitt
como actor ya con sonido pero que al público le hace gracia escuchar
su voz. O la fiesta en la que Margot Robbie les vomita a todos,
primero dialécticamente y luego literalmente. O la desagradable
escena del espectáculo al que les lleva Tobey Maguire.
LO
PEOR: Ahora
que también entiendo que no es ni mucho menos una película para
todo el mundo. No hay mucha gente preparada para meterse estas más
de tres horas, metraje el que claramente se le podría haber
recortado treinta o cuarenta minutos, de excesos, idas y venidas. No
es una película fácil para el público medio.
REFERENCIAS:
Tanto
“Whiplash”,
“La la land” como “First man”, las películas anteriores de
Chazelle, hablan sobre el precio de los sueños, aun siendo
totalmente diferentes, pero la película a la que más recuerda esta
es a un clásico, “El crepúsculo de los dioses”.
CONCLUSIÓN: 7. Ni el talento de Damien Chazelle, ni la inspiración de un gran reparto, ni las críticas favorables han salvado a este despiadado retrato del Hollywood de la edad dorada del cine, de caer en taquilla como la propia Babilonia.
sábado, 15 de abril de 2023
Microcríticas Express: Rabid/Muerte, muerte, muerte/Reza por el diablo
La
original formaba parte de la célebre etapa de David Cronenberg
llamada “la nueva carne”, formada por títulos como “Vinieron
de dentro de . . “, Cromosoma 3”, “Videodrome” y . .
“Rabia”. No era la mejor de ellas pero como todo lo que hacía el
director canadiense, interesante. Bueno, pues esta es un remake de
aquella. Con bastantes cambios respecto a la historia original más
allá de que conserve la premisa principal y de que haya bastante
sangre y gore, que es lo único parecido. Tampoco soy tan iluso de
pensar que esta película iba a ser una obra maestra. El guion es un
cúmulo de despropósitos ya sea en cuanto a decisiones que toman los
personajes como en cuanto a diálogos bastante pobres. Por alguna
razón han querido vincular la historia al mundo de la moda, cosa de
la que no había ni rastro en la original, quizá para meter con
calzador a la actriz que hace de protagonista, que por si alguien la
recuerda, es ese bellezón que hizo de Supergirl en la serie
“Smallville”, Laura Vandervoot. Por desgracia, ni ella ni mucho
menos sus compañeros de reparto realizan un gran trabajo de
interpretación sino todo lo contrario. No me importa que se varíe
la historia de la película precedente, para eso es una nueva versión que actualice un poco sus claves, de hecho, trata el tema de
la enfermedad, esa especie de rabia entre el vampirismo y el
canibalismo, como una pandemia, conscientes de lo que llevamos a
cuestas. El problema es que todo tiene una apariencia tan cutre. 4.
Aunque
se plantee como cualquier otro slasher, y de hecho, recuerda a varios
clásicos como “Siete mujeres atrapadas”, es de todo menos
típico. Es más, es una variante bastante curiosa que enlaza con el
subgénero del “whodunit” como ya hizo en su día “Scream”
pero más al estilo de las novelas de Agatha Christie en plan “Diez
negritos” en cuanto a como van sucediéndose las muertes. El propio
título de la película alude al juego que desempeñan en la historia
que trata de descubrir al asesino. Solo que la cosa digamos que se va
de las manos. Lo que sorprende es que el guion está realmente bien
hilado, que nos muestra esta trama de asesinatos como pretexto para
hablarnos de un grupo de amigos verdaderamente tóxico, donde todos
se meten “puñaladas” (no literales) por
la espalda. Lo que hace que dudes de todos los personajes hasta el
sorpresivo final. No digo que no se me pasara por la cabeza la
resolución pero aún así me parece bastante original. Y he estado
gran parte de la película bastante enganchado a la intriga de saber
quien era el autor de los crímenes. El casting femenino es muy
acertado, en gran parte gracias a ese guion que les da personajes con
cierto desarrollo a esas jóvenes actrices y no solo las tiene para
que corran por la pantalla gritando. Me parece una de las propuestas
más interesantes que he visto últimamente en este género pero hay
que dejar claro que no es un slasher típico en absoluto. 6’5.
Es
lo que yo califico como una de “sustitos”. Están la películas
de terror que crean una atmósfera, que te inquietan, aunque no
tengan sobresaltos. Y luego están estas, cuyos creadores son
conscientes de que hay un público que considera las películas de
terror en función del número de sustos. Para colmo, las críticas,
tanto profesionales como de aficionados no eran nada buenas. Pero
parece ser que se le achacaba querer ser algo diferente a la
propuesta habitual. Y por ahí si me entró la curiosidad. ¿Es
realmente distinta? No, tira de los mismos tópicos del subgénero de
exorcismos, de las subidas de volumen súbitas y de ciertos
efectismos ya vistos. No obstante, si tiene algo interesante y es
tratar el caso de posesión como una investigación científica a
pesar de estar llevada por personas de la iglesia. Pues bien sea
porque el listón de inicio se lo había puesto bajo pero mantiene la
tensión lo suficiente como para que no me haya aburrido. Porque es
típica pero no renuncia a la vía del suspense, no el generado por
el miedo a comerte un susto (que también) sino por el de la puesta en escena. De hecho, las secuencias de las sesiones de exorcismo
están bastante logradas. Además, la protagonista, Jacqueline Byers,
está muy esforzada en la causa, con su punto de reivindicación
feminista (y eso que es una monja), y en el reparto hay gente como
Virginia Madsen o Ben Cross. 5’5.
martes, 11 de abril de 2023
Escenas Míticas: Diablo - La profecía
La revista Entertainment Weekly la colocaba en el puesto 14 de películas más terroríficas de la historia del cine. Si me preguntaran a mí la pondría en el Top 5 pues sin duda es una de las películas que más miedo me ha dado. No sólo por contener varias muertes de las que más me han impresionado sino por el propio mensaje contenido en su título, una profecía que no podía pararse, se hiciera lo que se hiciera.
Aunque se barajaron otros títulos alternativos, como, “El Anticristo” o “La marca de nacimiento”. La traducción literal del título original no era “La profecía”, sino, “El presagio” (“The Omen”). Sea como fuera se convirtió en una de esas películas malditas de Hollywood, colocándose junto a otras igualmente marcadas por la tragedia, como “La semilla del diablo” o “El exorcista”.
Al abrigo del éxito de esta última venía la que hoy comentamos, tres años después de ella. Hay que decir que todas esas leyendas negras y supuestas maldiciones de estas películas son bien recibidas por sus productores pues alimentan el interés del público sobre ellas. Es más, muchas veces, sus campañas publicitarias explotan esa fama.
La mayoría de estas “maldiciones” tienen explicación. Se trata de películas con equipos de profesionales muy extensos, y muchas veces envueltos en diversos riesgos durante el rodaje. Por lo que el número de accidentes puede elevarse. No obstante, existen títulos, como los mencionados anteriormente, y este es uno de ellos, que desafían a toda lógica y que cuesta bastante explicar.
Ya comenzaba con la advertencia, antes incluso de comenzar el rodaje, del fundador de la Iglesia de Satán, Anton La Vey, al director del film, Richard Donner, de que abandonaran el proyecto pues presentía la muerte en él. Y lo cierto es que el propio Donner la estuvo rondando pues sobrevivió a un accidente de coche, en el cual también viajaban otros miembros del equipo. Pero además, el hotel donde se hospedaba fue atacado con explosivos por el grupo terrorista IRA.
El protagonista de la película, Gregory Peck, también rondó la tragedia. Un avión en el que iba a viajar, cuyo billete canceló, que se dirigía a Israel, se estrelló y no hubo ningún superviviente. Pero es que además, uno en el que si viajó, recibió un rayo en pleno vuelo. Exactamente lo mismo que le pasó al avión en el que viajaba el guionista David Shelter.
Aunque lo más impactante le ocurrió el director de efectos especiales, John Richardson, que se estrelló contra un letrero que marcaba la distancia hasta una localidad, que concretamente era 66,6 km (aunque esto me cuesta creerlo). Peor destino corrió su novia, que fue decapitada durante el rodaje de “Un puente lejano”, recordando a la escalofriante muerte del fotógrafo de la película.
Hubo una larga lista de actores para interpretar a Robert Thorn, que por unos motivos u otros rechazaron el papel, entre los que estaban Oliver Reed, William Holden (curiosamente interpretaría después en la secuela “La maldición de Damien” al hermano del personaje Richard Thorn), Charlton Heston, Roy Scheider y Charles Bronson. Finalmente fue Gregory Peck quien aceptó, como redención por la muerte de su hijo por suicidio, como padre que se siente culpable.
Le acompañó Lee Remick, David Warner y Harvey Stephens, el niño que hacía de Damien, que fue nominado por el Globo de Oro. Stephens se ganó el papel con el propio Richard Donner, ensayando la escena en la que la madre es atacada por Damien para no entrar en la Iglesia. Donner ejercía de madre, y fue arañado y golpeado por Stephens, hasta que le dio una patada en la entrepierna. Eso terminó de convencer al cineasta.
Para el que esta fue su primera película tras un largo periplo en la televisión. Después vendría "Superman", "Lady Halcón", "Los Goonies" y la saga "Arma letal". La película obtuvo excelentes críticas y funcionó de maravilla en taquilla. Costó apenas 3 millones de dólares y recaudó 60. Además, consiguió un Oscar, el de la terrorífica banda sonora de Jerry Goldsmith.
Los animales también tuvieron su protagonismo. De hecho, la película contribuyó a la "demonización" (nunca mejor dicho) de los Rottwailer, varios de los cuales atacaron a los especialistas. No así el líder de la manada, que fue tremendamente cariñoso con el reparto. Para la secuencia de los babuinos metieron una cría en el maletero del coche, así que el ataque es completamente real y la reacción de Lee Remick también.
Tuvo tres secuelas; "La maldición de Damien", "El final de Damien" (pedazo spoiler) y "El renacer" (para televisión), además de una miniserie spin off, "Damien" y un remake en 2006 a cargo de John Moore, cuyo máximo interés era la participación de Mia Farrow como Srta. Baylock, es decir, nuevamente relacionada con un niño demoníaco tras "La semilla del diablo".
domingo, 9 de abril de 2023
Dragones y Mazmorras: Honor entre ladrones
FICHA
TÉCNICA
Título:
Dragones
y mazmorras: Honor entre ladrones.
Dirección:
John
Francis Daley, Jonathan M. Goldstein.
País:
Estados
Unidos.
Año:
2023.
Duración:
134
min.
Género:
Fantástico,
aventuras.
Interpretación:
Chris
Pine, Michelle Rodriguez, Regé-Jean Page, Justice Smith, Hugh Grant,
Sophia Lillis, Chloe Coleman, Jason Wong, Daisy Head, Sophia Eleni.
Voz: David Sobolov
Guion:
Dave
Arneson, John Francis Daley, Jonathan M. Goldstein, E. Gary Gygax,
Derek Kolstad. Historia: Chris McKay.
Producción:
Jeremy
Latcham, Brian Goldner, Nick Meyer.
Música:
Lorne
Balfe.
Fotografía:
Barry
Peterson.
Distribuidora:
Paramount
Pictures.
CRÍTICA
SINOPSIS:
Una
banda de ladrones con distintas y variadas habilidades personales, se
propone robar una reliquia perdida en el pasado con diferentes
motivaciones para todos ellos. Pero las cosas no saldrán como habían
previsto.
LO
MEJOR: Esta
si que no la vi venir. Esperaba que fuera un simple producto de
entretenimiento y ya. A ver, y es lo que es, pero mucho mejor de lo
previsto, y la sorpresa ha sido más que agradable. Porque recupera
un cine que hemos perdido y que se terciaba bastante en la década
de los ochenta, el cine familiar fantástico. Si, aprovecha ese efecto
nostálgico ochentero para regalarnos una película de aventuras como
las de antes pero con los medios de ahora. Pues visualmente es una
puñetera pasada pero eso no significa que los efectos especiales se
coman la película, sino que están al servicio de la historia. De
hecho, ni siquiera es todo CGI (aunque indudablemente es
predominante),
hay muchos escenarios reales y criaturas animatrónicas, lo que le da
fisicidad. Escenarios que son impresionantes. Pero es que además,
tiene un ritmo perfecto, ni demasiado trepidante ni demasiado lento,
lo que contribuye a que el resultado sea tremendamente entretenido, y
divertidísimo, con mucho humor pero no hasta el punto de ser una
sucesión de chistes a lo Taika Waititi. Que era lo que me temía al
conocer que los directores, John Francis Daley y Jonathan M.
Goldstein, solo habían hecho comedias, aunque “Noche de juegos”
estaba muy bien. Pero que va, dosifican el humor lo necesario. Y ojo,
su estilo visual es un acierto. En definitiva, que sus 135 minutos se
pasan volando y yo particularmente me lo he pasado bomba.
Interpretación:
Es
una historia de grupo y, por tanto, el reparto es bastante coral,
repartido entre actores y actrices con una química absoluta entre
ellos. Sobre todo entre Chris Pine y Michelle Rodríguez. Pero
perfectamente secundados por una de mis debilidades, Sophia Lillis, e
incluso Justice Smith. Todo funciona, incluso los villanos. De hecho,
cada vez que aparece Hugh Grant se roba la película.
Escena
(SPOILERS!!): Estructuralmente
se
asemeja a una partida del juego de rol, superando una prueba tras
otra, incluso como pantallas de un videojuego. Pero es que funciona
perfectamente. Como
en la búsqueda del yelmo, en los enfrentamientos con los distintos
dragones, o la prueba final en el laberinto de los Juegos. Aunque
personalmente me quedo con el “interrogatorio” de los muertos de
la batalla (con la que van enlazando) en el cementerio, de lo más
divertido que he visto últimamente. Que
además permite ver la batalla desde distintos personajes. Y con el
juego que dan los portales para desplazarse por ellos y como los
aprovechan visualmente, nuevo acierto de los directores. Y no hay que
perderse el guiño que se hace a la serie de dibujos. Si, aparecen
varios personajes encerrados en una jaula vestidos exactamente como
los de la serie de los ochenta.
LO
PEOR: Repito,
no se hace larga en absoluto pero por poner alguna pega, quizá los
flashbacks se podrían recortar un poco. Aún así, están bien
integrados y no te sacan de la historia sino que aportan profundidad.
Lo único que ajustando un poco ahí, el metraje se habría quedado
en dos horas, que habría sido lo ideal.
REFERENCIAS:
Olvidaros
(si podéis) de la “Dragones y mazmorras” de Jeremy Irons. Esta
juega en la liga de “Willow”, “La historia interminable” o
“La princesa prometida”, al menos en cuanto a tono. En cuanto a
medios, evidentemente las supera. No creí que dijera esto pero
espero que haya secuela.
CONCLUSIÓN: 7’5. Recupera el cine de fantasía y aventuras ochentero para toda la familia y se confirma como una de las sorpresas de este año porque el resultado no es solo muy entretenido y divertidísimo, tiene calidad y . . . magia.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)