FICHA TÉCNICA
Título: Dark.
Dirección: Baran bo Odar (Creator), Jantje Friese (Creator), Baran bo Odar.
País: Alemania.
Año: 2017.
Duración: 60 min (10 episodios).
Género: Intriga, ciencia-ficción, suspense.
Interpretación: Anna König, Roland Wolf,
Louis Hofmann, Oliver Masucci, Jördis Triebel, Sebastian Rudolph, Mark Waschke,
Karoline Eichhorn, Stephan Kampwirth, Anne Ratte-Polle, Helena Abay, Harald
Effenberg, Sebastian Hülk, Deborah Kaufmann, Ella Lee, Andreas Pietschmann,
Walter Kreye, Peter Benedict, Christian Steyer, Leopold Hornung, Tatja Seibt,
Lisa Vicari, Hermann Beyer, Angela Winkler, Peter Schneider, Stephanie Amarell,
Carlotta von Falkenhayn, Arnd Klawitter, Anatole Taubman, Luise Heyer, Lena
Dörrie, Julika Jenkins, Michael Mendl, Gwendolyn Göbel, Lisa Kreuzer, Hannes
Wegener.
Guión: Jantje Friese, Baran bo
Odar, Martin Behnke, Ronny Schalk, Marc O. Seng.
Producción: Baran bo Odar, Jantje Friese, Quirin Berg, Max
Wiedemann, Justyna Müsch.
Música: Ben Frost.
Fotografía: Nikolaus Summerer.
Distribuidora: Netflix.
CRÍTICA
SINOPSIS:
En un pequeño pueblo alemán se están
dando una serie de desapariciones sin explicación. Las investigaciones dejan al
descubierto oscuros secretos en cuatro familias que abarcan distintas épocas
del pasado y se entrelazan con el presente.
LO MEJOR: Seguro que intencionadamente se han dejado
querer por las comparaciones con otras series, como la que más suena
"Stranger things", en busca su masa social se seguidores y el gran
éxito que la acompaña. Pero sabiendo muy bien que "Dark" es otra
cosa. De hecho, aunque es cierto que tiene algunos guiños a la década de los
ochenta (juguetes, anuncios de televisión, canciones) y una buena parte del
argumento se desarrolla en ese marco temporal, no es una serie nostálgica, ni
mucho menos. Es mucho más oscura (como el propio título indica) y desde luego
que mucho más complicada. Pues ese enorme y muy enrevesado rompecabezas que nos
proponen tiene como destino un público más adulto, a tener por la explícita
violencia mostrada, de las muertes, del lenguaje, algunos desnudos y un tono
marcadamente tenebroso. Cantidades industriales de misterio, terror y
ciencia-ficción para una compleja trama de paradojas temporales, distintos
planos de la realidad buscando los límites de esa línea que separa lo científico
de lo sobrenatural y que aquí se presenta difusa. Cabe también adentrarnos en
el drama humano de cuatro familias cargadas hasta los topes de secretos. Algo
que nos recuerda más a Stephen King que a la citada "Stranger
things". Para ayudarnos un poco, se incluyen unos muy interesantes
montajes de imágenes con música de fondo que pretenden ir guiándonos en la
historia a fin de que no nos perdamos del todo. Y por supuesto, la fotografía y
la ambientación son excelentes.
Interpretación: Quizá sea el apartado menos destacado de
la serie. No por ello estoy diciendo que sea malo. En absoluto, pero en un
producto donde destacan tantos aspectos, los actores simplemente están correctos.
Un poco por encima quizá estén Louis Hoffman, Andreas Pretschman, Oliver
Musucci, Karoline Eichhorn y Mark Waschke. Como curiosidad, la participación de
la bellísima Antja Traue, que recordaremos de "Pandorum" y como la
Fedora de "Man of Steel".
Escena (spoiler): Más que enumerar escenas, y
aprovechando que en este apartado se pueden poner spoilers, voy a explicar un
poco el argumento. Todo gira en torno a la desaparición de dos chicos. Lo que
iremos descubriendo es su relación con unas cuevas donde se encuentra un túnel
que ejerce como agujero de gusano y conecta periodos temporales separados por
33 años, de tal manera que desde 2019 puede llegarse a 1986 y de ahí a 1953.
Casi nada. Se juega continuamente al juego de que fue antes el huevo o la
gallina, con situaciones que se dan en constante bucle y personajes afanados en
combinar el pasado para corregir el futuro, inútilmente porque cualquier cambio
produce un incontrolable e impredecible efecto mariposa. Y de alguna manera, lo
que viene a contar la serie es que el tiempo está conectado por los extremos,
de tal manera que el principio y el final están entrelazados.
LO PEOR: Es tremendamente difícil de seguir y para llegar a
hacerlo hay que ponerse el 100% de atención y prestarse a todos los detalles.
La cantidad de personajes es bastante generosa y por si esto fuera poco, hay
que seguirlos mediante diferentes intérpretes en diferentes líneas y
momentos temporales. Es un galimatías considerable.
CITAS: “El ayer, el hoy y el mañana no son consecutivos. Están conectados en un círculo
que no tiene fin”. “La pregunta no es donde, ni quien, ni como, sino cuando”. “Todo
se repite”. “Esta ciudad está enferma”. “Hay un asesino entre nosotros”. “No
solo el pasado influye en el futuro. El futuro también influye en el pasado”. “El
principio es el fin y el fin es el principio”.
REFERENCIAS: A la ya nombrada de "Stranger
things" podemos añadir nexos con "The OA", el tono de "The
killing", e incluso la sensación de micro-mundo de "Twin Peaks".
Y desde luego toda esa legión de películas de paradojas temporales a lo
"Primer".
CONCLUSIÓN: 7’5. Gran sorpresa en forma de historia de paradojas
temporales con aroma europeo, para acabar un gran año de series.
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