Escenas Míticas: Luc Besson - Nikita, dura de matar

   Tras una temporada con proyectos de género infantil y familiar, Luc Besson ha vuelto al cine de acción con Scarlett Johanson como "Lucy", que tiene bastante buena pinta, y que nos sirve de reclamo para recordar algunos de los mejores títulos del director francés más americanizado.

Luc Besson es bastante asiduo a colocar como protagonistas de sus películas a alguna fémina que si no es el personaje principal es de vital influencia (además de mantener alguna que otra relación sentimental con ellas). En este caso, Anne Parillaud, que interpretó a una delincuente homicida condenada a la pena de muerte por matar a un policía.

   Pero cuando ya lo tiene todo perdido, o eso cree, la hacen una proposición que se ve obligada a aceptar. Su pena será conmutada a cambio de trabajar como asesina, para lo cual deberá ser adiestrada tanto en sus modales como en el manejo de las armas, además de llevar una doble vida. Quien se ocupa de ello es Tcheky Karyo.

   Besson es un especialista en escenas de acción, sobre todo en tiroteos. Consigue darles un aire de estilo además de unas ensaladas de tiros de lo más desenfrenado.Y posee una estética violenta muy a lo francés. Se puede ver bastante la diferencia si comparamos esta escena con la recreada en el remake americano.

   Al incluir un romance de por medio, la película fue tachada de algo lenta. Pero lo que Besson quería señalar es que Nikita, aunque pareciera que podía llevar una vida normal, en realidad era propiedad de quien la salvaron de su condena pero que le aplicaron otra. Por eso, ella debe estar preparada para matar en cualquier momento.

   Jean Reno se convertiría en unos de sus actores fetiches, incluso dándole el protagonismo total en uno de sus largometrajes ("León, el profesional"). La película no solo es destacable por sus escenas de acción, sino por su aplicada fotografía y la formidable música de Eric Serra.
   John Badham realizó un remake que copiaba casi literalmente éste film y que, sin embargo, no tenía su magia. Se llamó "La asesina" y fue protagonizada por Bridget Fonda y Gabriel Byrne.