FICHA TÉCNICA
Película: El lobo de Wall Street.
Título original: The wolf of Wall
Street.
Dirección: Martin
Scorsese.
País: USA.
Año: 2013.
Duración: 180 min.
Interpretación: Leonardo
DiCaprio (Jordan Belfort), Jonah
Hill (Donnie Azoff), Matthew
McConaughey (Mark Hanna), Kyle
Chandler (Patrick Denham), Jean
Dujardin (Jean-Jacques Saurel), Margot
Robbie (Naomi), Jon
Favreau (Manny Riskin).
Guión: Terence Winter; basado en el libro de Jordan
Belfort.
Producción: Martin
Scorsese, Leonardo DiCaprio, Riza
Aziz, Joey McFarland y Emma Koskoff.
Música: Howard Shore.
Fotografía: Rodrigo Prieto.
Montaje: Thelma Schoonmaker Powell.
Diseño de
producción: Bob Shaw.
Vestuario: Sandy Powell.
Distribuidora: Universal
Pictures.
CRÍTICA
SINOPSIS:
Década de los ochenta.
Nueva York. Jordan Belfort es un corredor de bolsa que se propone tener el
mayor éxito posible para rodearse de mujeres, drogas y muucho dinero. Por ello,
fue apodado “el lobo de Wall Street”.
LO
MEJOR: Es encomiable que
a estas alturas de su carrera, Scorsese sea capaz de sorprender con una
película que, si bien, tiene muestras personales de su estilo, se aleja del
tono de su cine habitual. De hecho, diría que es la película más alocada del
director, aunque si es verdad que se ve su típico pormenorizado retrato de un
personaje y el mundo que le rodea. Pero es que a pesar de sus tres horas de
duración el film no se hace para nada pesado, gracias al ritmo desenfrenado de
algunas fases y el ágil montaje de la narración, y eso que no es una película
de acción. Si a eso le agregamos un gran guión y un sentido del humor agresivo
que funciona tremendamente bien, nos queda todo un peliculón.
Interpretación:
Leonardo DiCaprio está
desatado. Puede que sea la mejor actuación de su carrera. Seguramente me
repita, de hecho así es, pero no entiendo que le pasa a la Academia con este
actor. Es una interpretación brutal y arrolladora. Y lo interesante es que su
talento está en cada película que protagoniza. Es más, la sociedad
Scorsese-DiCaprio está reportando grandes frutos, sustituyendo a Robert de Niro
como actor fetiche del director. No me olvido de Jonnah Hill como secundario
casi co-protagonista que está sobresaliente también.
Escena
(spoiler): Pues
prácticamente cada escena del film es como para hacer un comentario. La charla
que le da Matthew McConaughey a DiCaprio en el restaurante del principio es
como para coger notas. Pero hay secuencias que son desternillantes, como cuando
aparece por primera vez la despampanante Margot Robbie en una fiesta y Jonnah
Hill, colocado perdido, se masturba ante la mirada de todos los presentes, su
mujer entre ellos. O la discusión de DiCaprio con Margot Robbie, ya esposa,
porque ha mencionado el nombre de otra mujer mientras dormía. Pero, sin duda,
la mejor es cuando DiCaprio y Hill se toman unas pastillas de efecto retardado,
por lo que se toman más de la cuenta, y les produce un colocón descomunal. Es
para echar carcajadas a manta.
LO
PEOR: Quizá, y solo
quizá, a los seguidores más acérrimos del cine de gangsters del director no
termine de gustarle que se acerque tanto a la comedia. Además, aunque es
totalmente adrede y uno de los ganchos más cómicos, el lenguaje es muy, pero
que muy vulgar y hay tropecientas mil imágenes de drogas. Pero vamos, nada que
no se haya visto ya en una peli de Tarantino.
CITAS:
El juego consiste en
pasar el dinero del bolsillo de tu cliente al tuyo y ya”. “Lo único que está
entre tu meta y tú, es la historia que te sigues contando a ti mismo de porque
no puedes lograrla”. “No eres tu pasado, eres los recursos y capacidades que
has recogido de él”.
REFERENCIAS:
La estructura de
narración es como cualquier película de Scorsese. Sería una especie de
“Casino”, a veces con el humor ácido y negro de “Very bad things” y otras con
el alocado de “Resacón en Las Vegas”.
CONCLUSIÓN:
8’5. La sociedad Scorsese-DiCaprio firma su
mejor colaboración.
Personalmente, los últimos trabajos de Scorsese me habían defraudado, pero con ésta comedia -no es su primera vez- arregla esa decepción de una forma muy sobrada. La película es sublime. ¿Vulgar? Más bien plagada de excesos, pero eso es lo que la hace así de buena.
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