Escenas Míticas: Robots Gigantes - Acero puro

   A mí es que las películas de deportes me gustan, y si ya le sumas ciencia-ficción y robots pues me puede interesar bastante. Y siendo un gran seguidor de la saga "Rocky", aquí podemos encontrar la versión robotizada de ésta, con un toque de drama padre-hijo a lo "Campeón".

 

   Hugh Jackman dejó aparcadas las garras de Lobezno para interpretar a este perdedor que sobrevive como puede y que es tan desastre como se puede ver en la escena. Se dedica a ir por las ferias de los pueblos haciendo exhibiciones con su robot . . . hasta este día.

  Otra nueva burrada del padre, Charlie Kenton, que después de comprar un robot nuevo para combatir vuelve a echarlo todo a perder. Fíjate si se me parece a "Rocky" que Midas me hace referencia a Mr. T en "Rocky 3", con ese cepillo que lleva en la cabeza el robot.

   A ver, no se puede decir que el guión fuera un prodigio de originalidad. La historia está repleta de tópicos. Desde el padre que nunca se ha ocupado de su hijo en condiciones, éste que quiere pasar más tiempo con él, . . . Y, como en esta escena, encontrando un robot inferior a todos, que nadie quiere y con el que emprenderán la aventura.

   Mira que está manido el tema de el pequeño contra el grande, David contra Goliat. Pero es que da resultado. Quieras o no te toca el corazoncito y termina por engancharte. Da igual las veces que lo hayas visto antes.

   Si ésto no es una rememoración de los combates finales de la saga de "Rocky" pues no sé que es. Como se ha podido ver, los diseños de los robots están sumamente trabajados, los efectos especiales muy dignos y los combates muy emocionantes. Lo justo y necesario para una película destinada para toda la familia. Por cierto, veremos la banda sonora, que no está mal.
   Tuvo buena acogida por parte del público. De hecho, está en marcha una secuela en la que parecen haber convencido a Hugh Jackman y al director, Shawn Levi, para que repitan.