Se cumple este mes el aniversario de la muerte de uno de los actores más entrañables, carismáticos y queridos de Hollywood. Es por ello que este mes lo dedicamos a homenajear a Robin Williams, cuya desaparición me apenó significativamente dada la admiración que le profesaba. Haremos un repaso de sus películas, intentando ofrecer todos sus registros y sus facetas, más variadas de lo aparente.
Antes de embarcarnos en el tema puramente cinematográfico, seguro que muchos se preguntaron por el motivo del suicidio de Robin Williams. El 11 de agosto de 2014, Robin Williams decidió ahorcarse. Tenía 63 años. A la cara amable que dio en público hay que señalar que su vida privada estaba plagada de turbulencias. Se le conocen tres parejas estables y una hija, Zelda. Además, al parecer, se acababa de descubrir que sufría Parkinson. Pero a pesar de tener un largo historial de problemas con el alcohol y otras sustancias, no se le detectó rastro alguno de ellos en su autopsia.
La vertiente interpretativa más conocida de Williams fue la humorística. Aun así, ya veremos que era un actor mucho más versátil y polifacético de lo que se recuerda. “Jumanji” probablemente es una de las películas más divertidas de los noventa, y al bueno de Robin Williams le vino como anillo al dedo.
Basada en el cuento de Chris Van Allsburg, con tan solo 32 paginas, llegó a tener hasta siete versiones del guión. Sin embargo, esos convulsos comienzos no afectaron al resultado final. De hecho, “Jumanji” cuadriplicó en beneficios lo invertido. Costo 65 millones de dólares y recaudo 260, es decir, que resulto un negocio redondo.
Quizá hoy en día no se aprecia de la misma manera, pero en su momento, los efectos especiales, llamaron considerablemente la atención. Es cierto que, actualmente, los efectos digitales están tan a la orden del día que ya no nos impresionan de la misma manera, pero en los noventa se la podía considerar una de las películas más espectaculares. Razón de ello fue su nominación al oscar en la categoría de “efectos visuales”.
Dirigió Joe Johsnston, un veterano artesano del cine monstruos (“Jurassic Park 3”, “El Hombre Lobo”) y la verdad es que le salió una película de aventuras de lo más entretenida. Robin Williams explotó muy bien su vertiente cómica como en “Sra Doubtfire”, “Good morning Vietman”o “Flubber”.
Considero muy adecuada esta película para abrir el ciclo-homenaje que dedicaremos a Robin durante el mes de agosto, pero en adelante, veremos otros ejemplos en los que su interpretación tiene mucho más peso y dramatismo.
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