Otro de esos proyectos para los que sonó Tim Burton como
director y que finalmente se ocupó Robert Stromberg, quien se encargara del
diseño de producción de las últimas versiones de “Alicia en el país de las
maravillas “y “Oz, el poderoso”. Para mí fue toda una sorpresa y la considero
una de las mejores películas, si no la mejor, basadas en cuentos populares.
En esta ocasión tocaba la historia creada por Charles Perrault y los Hermanos Grimm, “La bella durmiente”. Hay que decir que es una versión tremendamente fantástica. Y, por tanto, alejada del clásico. Camino parecido al tomado por la última versión de “Blancanieves y la leyenda del cazador”, incluso yendo más allá que ésta.
La historia cambia bastante, es una adaptación muy libre del cuento.” Como ha cambiado el cuento”, que diría aquel, porque el ángulo desde el que se muestra el argumento es diametralmente distinto. De primeras, la protagonista es la propia bruja mala que da el título al film y es a través de ella desde la que nos muestra la evolución de los personajes.
La inversión económica fue más que generosa. No muchas películas de este estilo podían contar con un presupuesto tan amplio como los 180 millones de dólares empleados. Pero es que en taquilla recaudó una de las cifras más importantes del año, a la altura de los estrenos más punteros con 750 millones.
Uno de los factores más interesantes es la clara intención de tener un encuadre lo más novedoso posible. El guión, más allá del enfoque totalmente fantasioso y épico, es una reinvención del relato original, colocando a la bruja como un ser inicialmente bueno que se hace malvado por la acción de los hombres y que de nuevo el amor la trae al lado luminoso.
No en vano, y esto es una de las grandes sorpresas de la película, el beso que despierta a “la bella durmiente“ no es el del príncipe. Recordemos que debía ser amor verdadero para que éste surtiera efecto. Pero en este caso es el amor fraternal de una madre, lo que me dejó con los ojos como platos.
El reparto es bastante competente. Las brujas se han convertido en las protagonistas de las ultimas adaptaciones a cuentos. Julia Roberts y Charlize Theron en las últimas de “Blancanieves” y aquí Angelina Jolie se luce, pero bien. Está verdaderamente genial. Pero también tenemos a Elle Fanning, Sharlto Copley o Juno Temple.
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