Estamos
ante una de las mejores representantes, desde luego mi favorita, del
género conocido como Wuxia, y de la filmografía de su director, al
cual también tengo gran admiración, Zhang Yimou, que a algunos les
sonará por la que no es precisamente uno de sus mejores películas
pero que se hizo famosa por el protagonismo en ella de Matt Damon,
“La gran muralla”.
Pero
¿Qué es el Wuxia? Literalmente significa “caballeros de las artes
marciales” o “héroes de las artes marciales” y es un género,
tanto literario como televisivo y cinematográfico, específicamente de
la cultura china. Se le considera un género diferente al de artes
marciales aunque éstas siempre están presentes. Pero tiene otros
rasgos distintivos; un escenario histórico, lucha de espadas,
énfasis en el melodrama y temas como la amistad, la lealtad y la
traición. Además de cierto tono fantástico.
El
propio Yimou tiene otros buenos ejemplos de wuxia en su obra, como
“Hero”, “La maldición de la flor dorada” o “Sombra”.
Pero ya digo que personalmente “La casa de las dagas voladoras”
es la mejor. Perfecta representante del estilo característico de
Yimou, repleto de acrobacias a cámara lenta, combates con cable y
un sentido de lo visual tremendamente poderoso.
Porque
es una película de extraordinaria belleza visual. Cada plano, cada
movimiento de cámara, cada minuto del metraje, está
exhaustivamente planificado para una presentación estética
exquisita. Hasta los propios combates, que prácticamente parecen
danzas, son notablemente artísticos. Por cierto, coreografíados por
el prestigioso Ching Siu-Tung, que ya participó en una obra de culto
del género como “Una historia china de fantasmas”.
El
título original en China no tiene que ver con el dado para la
comercialización en el mercado anglosajón. Viene a ser “Shi mian mai fu” y es el nombre de una pieza musical tradicional china para
pipa (una especie de laúd), dónde se narra la batalla entre dos
dinastías de la China antigua. Pero además la película se inspira
en un poema popular (no voy a reproducir el título) en el que “
una mujer causa aflicción a dos hombres”.
De
hecho, si hay una aportación personal de Yimou como variante del
wuxia es precisamente que lo que realmente es la película, con sus
combates y todo lo demás, es una historia de amor. Una a tres
bandas, cuyo juego de pasiones y traiciones conforman un conflicto a muerte cercano a las tragedias griegas o incluso a las
shakespearianas.
La
película fue, sin embargo, rodada en Ucrania. Al parecer, según el
propio director porque en China ya no quedan grandes bosques. De
hecho, la secuencia en el bosque de bambú responde a la tradición
del cine chino de artes marciales de incluir una lucha enmarcada en
un escenario natural de bambú. Yimou consideraba que dicha escena no
podía rodarse en China.
La
protagonista absoluta de la historia es la bellísima Zhang Ziyi,
quién ya había aparecido en otras películas típicamente
características del wuxia, cómo “Zu Warriors” y lo que
probablemente es la más popular de todas “Tigre y dragón”. Aunque la actriz ha hecho también carrera en Estados Unidos
apareciendo en películas como “Memorias de una geisha” (como
protagonista), “The Cloverfield Paradox” o las dos últimas de
“Gozdilla”. Para preparar su papel de ciega, convivió dos meses
con una niña ciega a causa de un tumor cerebral.
El
film fue seleccionado por el gobierno chino para pugnar por el Oscar
como Película de habla no inglesa. Pero no fue nominada a pesar de
si haberlo sido para el Globo de Oro. Por cierto, que ese año ganó
la española “Mar adentro”. Tuvo excelentes críticas y
económicamente fue un éxito de taquilla. Costó 12 millones de
dólares y recaudó 93.
Hola, me gusto muchísimo tu publicación acerca de China. Google me recomendó tu blog y debo decir que me sorprendió gratamente. Te dejo en mis favoritos del navegador. Espero que vuelvas a escribir pronto nuevas publicaciones. Saludos.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu opinión. Espero que sigas leyendo el blog y te gusten las publicaciones.
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