Vale que quizá no sea la mejor película de Brian De Palma (de hecho, es seguro que no) pero verdaderamente se han dedicados pocos títulos del espacio al planeta rojo vecino. He querido rescatar ésta porque está muy bien filmada, contiene buenos momentos y tiene una resolución final muy interesante.
La película se terminó con prisas para estrenarse adelantando a "Planeta rojo" pues ya que, como decía antes, Marte no es un planeta muy demandado a la hora de hacer films de viajes espaciales, resultaba que precimente iban a estrenarse dos el mismo año. Para mí éste es el mejor de los dos.
Si hay algo que De Palama sabe hacer es como rodar una escena de tensión. Domina el manejo de la cámara a la perfección y lo cierto es que el director está más cómodo montando secuencias que narrando el argumento. Aquí logra un gran realismo que me ha recordado a "Gravity".
Cuenta con un gran reparto. Si bien es grupo de actores más acostumbrados a ejercer de secundarios, De Palma optó por un elenco coral sin estrellas pero con actores muy competentes tales como Tim Robbins, Gary Sinise, Don Cheadle y la bella Connie Nielsen.
La teoría formulada en la fase final de la película tiene su miga y actualmente, pero vamos en estos días, hay controversia acerca del origen de la vida en la Tierra. Por un lado están los que piensan que la existencia humana es puro fruto de la casualidad y los que opinan que la vida fue sembrada en nuestro planeta.
Y ¿ por cual me inclino yo? Pues se ha intentado reproducir las condiciones que dieron lugar a la vida y han sido un fracaso, así que no creo que sea tan fácil como que fuera por un simple golpe de suerte. No digo que fuéramos sembrados por los marcianos pero igual los primeros organismos que se desarrollaron en la Tierra si vinieran de fuera. Quizá algún día se sepa.
En fin, la película no es ninguna obra maestra pero merece la pena echarle un vistazo y reflexionar sobre la teoría final .
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