domingo, 6 de abril de 2025

Adolescencia

 

   FICHA TÉCNICA


Título: Adolescencia.
Dirección: Philip Barantini.
País: Reino Unido.
Año: 2025.
Duración: 228 min.
Género: Drama, thriller.
Interpretación: Stephen Graham, Ashley Walters, Erin Doherty, Owen Cooper, Faye Marsay, Christine Tremarco, Mark Stanley,Jo Hartley, Amélie Pease.
Guion: Stephen Graham, Jack Thorne.
Producción: Jo Johnson.
Música: Aaron May, David Ridley.
Fotografía: Matthew Lewis.
Distribuidora: Netflix.

   CRÍTICA

   SINOPSIS: Un chico de trece años es arrestado por la policía. Se le acusa de apuñalar a una compañera de colegio. La investigación pone al descubierto la situación de los adolescentes en la actualidad.

   LO MEJOR: No se basa en un hecho real concreto pero si surge ante el incremento de la violencia entre jóvenes, especialmente con arma blanca mediante. Es, por tanto, una miniserie para el interés de todo el mundo pero que preocupará, y con razón, principalmente a los padres. Es importante señalar que no es un thriller policíaco, como a priori podría preverse si no un drama con claras intenciones de hacer reflexionar al espectador. No va por el camino del true crime. De hecho, ya sabemos quién es el culpable desde el primer episodio. Es decir, esto no va de descubrir quién es. En lo que se centra es en el porqué. La respuesta corta sería Internet y la un poco más desarrollada es que los jóvenes de hoy en día se enfrentan a una amenaza digital contra la cual los padres no pueden protegerles, por desconocimiento. Y me incluyo en esa ignorancia, me ha sorprendido descubrir que en redes sociales existe prácticamente un lenguaje en clave basado en emoticonos, colores y demás, que para la mayoría de adultos no tiene ningún significado. Un mundo digital con corrientes de pensamiento difusoras de odio, de ideologías misóginas, racistas y de toda clase de extremismos, tremendamente peligrosos para los adolescentes. Ese es el contenido pero la serie también se esmera en la forma. Los cuatro episodios han sido rodados en plano secuencia y, por tanto, en tiempo real, y no precisamente de los trucados, lo que supone una complejidad técnica brutal, un ejercicio de planificación fuera de lo normal. Todavía me hago cruces de como han logrado filmar ciertos desplazamientos, cómo han pasado de seguir a los personajes por pasillos a planos cenitales. No obstante, lo más importante es que este recurso no se utiliza con motivación estética sino para ofrecer al espectador una experiencia inmersiva con el mayor realismo posible. Le van a llover los premios.

   Interpretación: La cara más reconocible es la de un Stephen Graham que interpretativamente está hecho un coloso pero que además ejerce como coguionista. Graham da una máster class desde la contención. No obstante, la gran sorpresa es la del joven debutante Owen Cooper. De verdad que es alucinante lo que ha hecho este chico a nivel de actuación sin ninguna experiencia y encima lidiando con el difícil formato de rodaje del plano secuencia. También destacaría el trabajo de Erin Doherty en el tercer episodio.

   Escenas (SPOILERS!!): Cuatro episodios que representan cuatro horas en tiempo real pero separadas temporalmente. El primero muestra la detención e interrogatorio, con momentos especialmente dramáticos como el vídeo donde se confirma la culpabilidad del chico, asestando varias puñaladas a una chica. El segundo nos enseña el entorno estudiantil del agresor, con una visita a su escuela que resulta especialmente incómoda, que rebosa violencia y agresividad. El tercero nos sumerge en una de las sesiones de evaluación psicológica, donde vemos como la psicóloga hace uso de varias estrategias para analizar el comportamiento y reacciones de Jamie (Cooper). Y el cuarto nos cuenta la repercusión que ha supuesto para su familia. Quizá es el más flojo, pero tiene un momento tremendo, cuando el dependiente del centro comercial le muestra su apoyo al padre pero con unos argumentos que realmente dan miedo. Un apunte interesante es que la víctima ejercía bullying contra su posterior agresor, no como justificación o atenuación del crimen, sino como parte del problema subyacente.

   LO PEOR: Lo único que me parece reprochable es no ofrecer la visión de la víctima, de la que solo dan un par de apuntes y nunca desde el ángulo de su familia o de ella misma.

   REFERENCIAS: Aunque puedan aparecer referencias de series policiacas sobre jóvenes, como “Así nos ven” o “The night of”, creo que tiene más relación temática con películas como “Desconexión” o “Tenemos que hablar de Kevin”.

   CONCLUSIÓN: 8. Brillante en la profundidad dramática a la hora de tratar el tema en cuestión y brillante en la forma de exponerlo. Se perfila como una de las mejores series del año y es fácil vaticinarle una buena cosecha de premios.




miércoles, 2 de abril de 2025

Escenas Míticas: Terrorismo - El puente de Casandra

 

   Aprovechando el estreno de la nueva película de Rami Malek como protagonista desde que ganara el Oscar con “Bohemian Rhapsody”, pues hasta ahora venía apareciendo en buenas películas pero no en el papel principal, que toca los temas del terrorismo y el espionaje, vamos a dedicarle el ciclo de este mes precisamente a las películas de terroristas, que hay unas cuantas y algunas muy buenas.


   Aunque la que vamos a tratar hoy casi estaría más encuadrada en el género de catástrofes, que tan de moda estuvo en los años setenta con títulos como “El coloso en llamas” o “Terremoto”, ambas de las que hemos hablado aquí en el blog, de cuyo éxito se quiso beneficiar ésta, “El puente de Cassandra”.


   Pero si comienza con el ataque de dos terroristas, que terminan contagiándose de un peligrosísimo virus, y uno de ellos se traslada al interior de un tren. A partir de ahí es ese tren el personaje realmente protagonista y es cuando se desarrolla la trama más en el ámbito del cine de catástrofes.


   El escenario de un tren ha sido tan recurrente en el cine que casi podría considerarse un subgénero en sí mismo, como ya decíamos como el de submarinos, por ejemplo. Ejemplos como “Asesinato en el Orient Express”, “Desde Rusia con amor” (de la saga Bond), el slasher “El tren del terror” o “Pánico en el Transiberiano”, entre muchos otros títulos. Incluso más recientemente con “Rompenieves”, “Tren a Busan” o “Bullet train”.


   Un tren real que fue prestado por una compañía ferroviaria suiza. Por lo que todas las imágenes exteriores del medio de transporte son absolutamente reales a excepción de los interiores, que se rodaron en un estudio y los de la escena final que se reprodujo con una maqueta pero con muy aceptable realismo para la época.


   El responsable de la dirección era un George Pan Cosmatos que tenía una filmografía más bien corta y no precisamente muy reconocida pero con títulos muy molones de género como esta misma que tratamos hoy, la monster movie “Leviathan”, el western “Tombstone”, “Rambo 2” y “Cobra”.


   Cosmatos sufrió cólera cuando era niño y vivía en Egipto, y tenía un muy mal recuerdo de ello. Y quería hacer una película, coescrita por él mismo con lo que consideraba lo peor que podría crear la humanidad, los virus o bacterias, que producían enfermedades y potenciales pandemias. Murió en 2005, sin conocer que sus palabras se confirmarían con una pandemia, del Covid-19, probablemente manipulado por el hombre, que puso en peligro a la población mundial.


   La elección del reparto seguía en la línea del cine de catástrofes anteriormente mencionado, juntando varias estrellas en pantalla. Aunque es cierto que varias de ellas no precisamente en el punto más alto de sus carreras. No obstante, no dejaba de ser interesante ver en la misma película a Richard Harris, Sophia Loren, Ava Garner, Burt Lancaster, Martin Sheen u O.J. Simpson.


   Charlton Heston rechazó el papel protagonista por varias razones. Primero porque decía que las películas sobre enfermedades no solían gustar a la gente. Y segundo porque apenas dos años antes había protagonizado precisamente “Terremoto” y no quería encasillarse más en el subgénero de catástrofes.

   La película tuvo críticas bastante negativas. Sin embargo, tiene buenas opiniones por parte del público en las webs de cine. Tuvo un presupuesto inferior a lo que se terciaba en esta clase de películas, 6 millones de dólares, recaudó 15 en taquilla. A ver, buena buena, no es. Es cierto que en ocasiones tiene decisiones de guion terribles y una buena colección de gazapos en el rodaje.. pero me parece un thriller tremendamente disfrutable, muy entretenido y además con la maravillosa banda sonora de Jerry Goldsmith.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...