Creo
que es de las mejores series que hay actualmente. Historias
totalmente independientes correspondientes a cada una de sus
temporadas que solo tienen en común que se desarrollan en un lujoso
resort del mundo, siempre diferente, de una misma cadena hotelera. No solo
eso, todas suponen una crítica a la clase rica desde la sátira,
tanto en el tono del drama como el de la comedia, aunque domina el
primero. Aquello de que los ricos también tienen problemas pero los
abordan de vacaciones en un hotel de lujo. El gancho de inicio en
cada temporada es comenzar con la muerte de un personaje que solo
descubriremos en el último episodio, lo que te hace estar todo el
tiempo intentando adivinar cual es y porque. No obstante, aunque
pueda parecer el principal atractivo, en realidad lo son las
historias de esas familias que están de vacaciones en ese lugar
exótico, con todas las comodidades pero muy lejos de ser felices.
Porque su piedra angular es siempre tener un excelente guion, que
hace lucir a unos espléndidos repartos repletos de caras conocidas
pero no de estrellas, eternos secundarios pero muy buenos. Por
ejemplo, en este tercera entrega, destacan Walton Goggins y Carrie
Coon, pero el resto están geniales también. El responsable de todo
es Mike White, que a parte de escribir todos los episodios, también
los dirige, lo que confirma que esta serie es una obra de autor. Y
que aquí probablemente haya hecho la mejor temporada de la serie.
Desde luego visualmente es la más llamativa y su desenlace es, sin
duda, el más trágico. Aunque el villano siempre es el mismo, el
dinero, dato que confirma cierto personaje que conecta con la primera temporada. Ha sido renovada para una cuarta. Señor White ¿Qué tal en
África esta vez? 7’5.
Antes
de meternos en faena con la segunda temporada de esta serie, que ya
adelanto que me parece sensiblemente inferior a la primera, voy a dar
unos palitos a muchos (no todos) fans del videojuego. Por un lado,
me parece repugnante el acoso al que se está sometiendo a Bella
Ramsey. Ha llegado un momento en que esa obsesión con los parecidos
físicos me parece enfermiza. Porque eso opaca el trabajo
interpretativo, que es lo importante, que hace esta actriz. Y lo
mismo vale para Kaitlyn Dever. Por otro lado, el gran giro que tenía
esta temporada ya me lo esperaba porque o bien los que lo conocían del
juego o los que lo ven en el episodio nada más salir, son incapaces
de callarse y dejar que los demás lo puedan descubrir por si mismo.
Salvado ya este escollo, he de decir que la serie está
excepcionalmente rodada, con algunas secuencias realmente
impresionantes, tanto desde el espectáculo como desde lo dramático.
Y las interpretaciones están a un gran nivel, tanto de protagonistas
como de secundarios. Aunque hay que reconocer que cuando no está
Pedro Pascal en pantalla, baja bastante la cosa. Aunque, por contra,
me ha sorprendido muy positivamente el trabajo de Isabela Merced.
Donde tengo algunas objeciones es en el aspecto narrativo. Primero
porque hay unas elipsis brutales (me da bastante igual si esto viene
del videojuego, esto es una serie) y luego porque verdaderamente
cuentan bastante poco de lo que son los infectados, que pasan a un
plano muy secundario. Vamos, como en casi todas las series y
películas de este tema, que al final es una historia de humanos con
infectados por en medio. 7.
Ha
sido renovada por una cuarta temporada pero no han dicho que sea la
última, lo cual me pone nervioso, no solo porque considero que ya
debería ir encaminándose al final, sino porque cuando una serie de
este tipo, tan misteriosa, si no la concluyen y empieza a dar la
sensación de que se alarga innecesariamente, te puede dar un bajón
de audiencia y, de repente te la cancelan y te dejan sin final. No es
que esté ocurriendo eso, el arco argumental sigue bien su curso,
pero creo que ahora es cuando no deben caer en la tentación. No
obstante, esta tercera temporada me ha pasado como en la segunda, que
cuesta un poco al principio pero ha terminado en todo lo alto. Lo que
parecía que podía ser un “Viven” se ha convertido en un
“Perdidos”, con toques de “El señor de la moscas”, en una
historia contada en dos líneas temporales, pasado y presente, donde
me sigue interesando más que pasó en ese bosque, con esas
supervivientes del accidente aéreo, para que tuvieran esas secuelas
en el futuro. Donde sigue planeando la explicación sobrenatural y
fantástica, aunque me sigo decantando por la psicológica. Pero
vamos, que sigue en el aire. Porque tiene incluso un toque de terror,
aunque no muy acentuado. Para los que todavía no hayan
abordado esta serie, que nadie se piense que por estar protagonizada
en parte por un reparto joven, está dirigida a ese público, porque
es una historia tremendamente oscura, aunque tenga dosis de comedia
negra en una de esas líneas temporales. 7.
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